Antonio Banderas no es de los famosos que se crecen con los premios. Es más, tuvo reticencias a la hora de sujetar el Goya de La dama y la muerte porque, dijo, "de aquí me pertenece sólo una esquinita". Se lo pasó calurosamente al director de Kandor Graphics, Manuel Sicilia, ante la 'desaparición' de Javier Recio, autor de la película ganadora del Goya y nominada a los Oscar, que se ausentó un momento en el camino entre la sede de Kandor en el Zaidín y el Museo Memoria de Andalucía de CajaGranada. "Seguro que ya lo ha fichado alguna compañía norteamericana", bromeó Banderas.

De Granada, sin embargo, el actor se ha ido con varios premios de todos los tipos. Su primera sorpresa al llegar a la sede de CajaGranada fue encontrarse con la exposición de Ruven Afanador, autor al que conoce personalmente y de quien tiene en su casa la reproducción de una de sus obras.

Antonio Jara, el nuevo presidente de CajaGranada, se felicitó por estrenarse con esta visita. Tras firmar en el libro de honor del museo, sólo lo habían hecho hasta ahora los Reyes el día de su inauguración, Jara obsequió a Banderas con la reproducción en bronce de un león de la Alhambra. La amistad entre el actor y la entidad ya había empezado antes, como subrayó su presidente, pero sigue consolidándose. Muestra de esa relación son los proyectos futuros con el actor, que se trataron en una reunión privada, pero también dos detalles que emocionaron particularmente al actor malagueño: del museo se fue con una Tarjeta Amiga para toda su familia, Melanie Griffith, su madre Tippi Hedren; su hija, Estela del Carmen, y la hija de Melanie, Dakota Johnson. En la visita al museo, el actor también tuvo la oportunidad de ver en la sala 3 dedicado a las Costumbres y Tradiciones una escena de la Semana Santa malagueña, algo que le emocionó porque "cuando uno está fuera de su tierra", dijo, "se la echa mucho más de menos". A Granada volverá pronto y seguro que, con toda su familia, disfrutará, además del rodaje de Boabdil, de la tarjeta del museo.