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'Así que pasen cinco años', la obra onírica de Lorca, llega a Granada

  • Teatro para un Instante monta en el Isabel la Católica una de las piezas 'imposibles' de mayor complejidad escénica y dramática del poeta granadino

Una de las obras teatrales más atrevidas y complejas de Lorca, Así que pasen cinco años, llega al teatro Isabel la Católica mañana y el sábado, a las 21.00 horas, de la mano de la compañía granadina Teatro para un Instante dentro de su programación García Lorca Teatro. El montaje está dirigido por Miguel Serrano y protagonizado por los actores Pepe Cantero, José Vera y Nuhr Jojo, entre otros.

"En este proyecto hemos puesto toneladas de esfuerzo, de osadía y de ilusión", señaló ayer Miguel Serrano. "A mí me da un vértigo tremendo. La obra es un hito en la escritura dramática de este país", dijo el director.

Serrano señaló que, desde que se creó el proyecto García Lorca Teatro dentro de Teatro para un Instante, auspiciado por el Ayuntamiento de Granada, la compañía había establecido un ciclo de formación del público respecto al teatro lorquiano. "Empezamos con los espectáculos más populares para llegar ahora a su teatro imposible desde la madurez".

Así que pasen cinco años es una obra, añadió Miguel Serrano, que resultaba una pieza avanzada a su tiempo en 1931, año en que se escribió, siguió siendo avanzada a su tiempo en 1960 y continúa estando por delante de su tiempo en 2009. "Esto no es un western psicológico", dijo el director. "Aquí vamos a hablar de un sueño, a contar un sueño y, en un sueño, como dijo Freud, todos los personajes que intervienen son representaciones de la persona que sueña".

"Hay surrealismo y mecanicismo", añadió, "pero también esa carga granadina de humor fino. García Lorca compuso un prodigio de estructura. Cuando Lorca hizo Así que pasen cinco años, acababa de terminar El público, una obra que leyó a sus amigos y que obtuvo como respuesta: 'Estás chalado perdido'. Lorca dijo: 'Pues ahora os váis a enterar' y escribió esto".

En Así que pasen cinco años conviven dos estructuras dramáticas, diferentes por completo, pero complementarias entre sí, explica Teatro para un Instante. "Una lineal, de corte surrealista, donde los acontecimientos se suceden sin lógica, pero amablemente. Y además, hay otra, circular, y próxima al 'monodrama', en la que el protagonista, El Joven, no sólo produce la acción, sino que la construye en su imaginario, dotándola de personas que son, o bien reflejos de su propia persona, o por el contrario, arcanos de la conducta humana, símbolos que compendian la realidad que el joven construye".

La obra es tan onírica y compleja que García Lorca quiso estrenarla con una compañía comercial, pero al poco tiempo se dio cuenta de la inviabilidad en este campo y acabó entregándosela a una compañía universitaria. No llegaría a verla en escena porque la Guerra Civil estalló antes, según explicó Miguel Serrano.

"Es una obra sobre el miedo a amar, el miedo a ser amado y la decisión de posponer la vida para no tener que enfrentarse a las propias contradicciones", dijo el director, que puntualizó que es, ante todo, "el sueño de un señor que cuando sueña no es dueño de sus sueños".

Así que pasen cinco años pertenece a la trilogía que completan las obras El público y Comedia sin título, tres piezas de enorme complejidad inspiradas tras la estancia de Lorca en Nueva York y Cuba. "El poeta decía que el teatro que le interesaba hacer era éste. El quería poner en pie este tipo de lenguaje".

Serrano avanzó también su intención de llevar a la escena para el año 2011 el montaje de El público, un drama sobre la homosexualidad y la accidentalidad del amor. Su intención es hacerlo en una especie de tablado flamenco, tal y como llegó a proyectar hace unos años con el coreógrafo Mario Maya.

Teatro para un Instante, compañía formada en 1983, ya ha llevado a los escenarios en los últimos seis años obras como El retablillo de Don Cristóbal, Doña Rosita la soltera, Bodas de sangre o La casa de Bernarda Alba.

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