LA propuesta es casi irrechazable: convertir el Palacio de Daralhorra, propiedad de la Junta de Andalucía, en la puerta de entrada al Milenio, en la sede del gran Centro de Interpretación anunciado por José Antonio Griñán hace unos días. En pleno corazón del Albaicín, se simboliza con hechos, con proyectos y con realidades, la apuesta del Gobierno andaluz por utilizar la conmemoración de los mil años de la fundación del Reino de Granada como impulso para el desarrollo de la provincia. En la última Comisión de Patrimonio, Cultura ya aprobó una inversión de más de 600.000 euros su reforma. En un año, el edificio nazarí podría estar en pleno funcionamiento representando, a los pies de la Alhambra, en el barrio Patrimonio de la Humanidad, que Granada tiene 'su' oportunidad. Chaves y Zarrías ya dieron el visto bueno a la iniciativa, aunque ahora hace falta que Griñán dé su beneplácito. Pocos edificios de la capital responden con tanto simbolismo al espíritu del Milenio.

MÁS ARTÍCULOS DE OPINIÓN Ir a la sección Opinión »

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios