Mar adentro

Milena Rodríguez Gutiérrez

Regresando

EN el último año los periódicos se han dedicado a publicar artículos sobre la posible vuelta a casa (a veces, casa es sólo un término cómodo, un modo convencional de decir, muy poco ajustado a la realidad de los hechos) de los inmigrantes. Sobre todo de los inmigrantes latinoamericanos. En este diario he leído al menos dos reportajes sobre el tema: uno, hace ya algunos meses; otro, el reciente domingo. Como tengo la manía del recuerdo y de las comparaciones, la manía, en fin, de la literatura, me fijo en el título de ambos. El primero se llamaba "Inmigrantes. Resistir o regresar", un título épico, heroico y shakespereano (especie de ser o no ser en clave inmigrante). El del domingo pasado era diferente: "Historias de ida y vuelta", que evocaba, no el combate ni el conflicto, sino lo lírico; no el esto o el aquello, sino el esto y el aquello.

La evolución de los títulos puede dar la medida de la evolución de los asuntos. Así, es posible decir que el primer título hacía referencia a un combate y a ciertas alternativas o disyuntivas; aquel título dejaba todavía abiertas algunas posibilidades a la vida de los inmigrantes en España. El segundo, por el contrario, alude al fracaso del combate (la lírica, ya se sabe, es eso a lo que recurrimos cuando todo está perdido) e instituye una certeza: la vuelta que, colocada en el mismo lugar de la ida y aún sin haberse producido, ya nadie pone en duda.

La emigración es un acto que lleva siempre en sí la posibilidad del regreso. Pero no es lo mismo volver porque la casa de partida se ha arreglado o ha habido en ella evidentes mejorías, que volver porque la casa de acogida se ha caído, o ya no tiene espacio para cobijar al de fuera. La mayoría de los inmigrantes latinoamericanos que vuelven lo están haciendo obligados por la segunda circunstancia. Para muchos, la casa sigue estando aquí ("Los que yo quiero es ser español y echar raíces", decía uno de ellos) o ya ha dejado de estar en parte alguna.

Imagino (ya dije que tengo la manía de la literatura) los próximos títulos de los reportajes sobre el tema: "Regresando", que describirá a los inmigrantes montados en el avión y el último, "En casa", que mostrará la vida de vuelta. Aunque, tal vez, no sea éste el último. Habrá, acaso, si se atreven los periodistas, un reportaje más. Ese que cerrará el círculo y en el que los inmigrantes comprueban que la casa de origen sigue rota, desarreglada, sin sitio para el de dentro, y se plantean, otra vez, la ida. Su título, mítico, irónico, será el siguiente: "Resistir o regresar".

MÁS ARTÍCULOS DE OPINIÓN Ir a la sección Opinión »

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios