Esta boca es tuya

Antonio Cambril

cambrilantonio@gmail.com

El Serrallo y las elecciones

Mientras llega la sentencia, la decisión judicial trastoca la vida política y altera las perspectivas electorales de los partidos

Suma y sigue. Uno: la Guardia Civil detiene al ex ministro Zaplana por el presunto cobro de comisiones a cambio de adjudicaciones públicas de la Generalidad valenciana. Dos: el segundo de Montoro es imputado por posible prevaricación y malversación cuando era alcalde de Jaén. Y tres: la magistrada que instruye el caso decreta la apertura de juicio oral contra el ex alcalde de Granada José Torres Hurtado y nueve de los que fueron sus concejales, seis de los cuales aún permanecen en el Ayuntamiento. La noticia más cercana afecta a la práctica totalidad de los miembros del equipo que gobernó la ciudad hasta hace apenas dos años, que sufren acusaciones por un sinfín de delitos. Mientras avanza el proceso y llega la sentencia, la decisión judicial trastoca la vida política y altera las perspectivas electorales de todos los partidos. De entrada, ensombrece el futuro del PP. Lo lógico sería haber pedido o forzado la dimisión inmediata de los investigados que permanecen como concejales con la promesa de que se les recuperará si salen absueltos. Pero el partido ha tomado la peor deriva al apelar a la presunción de inocencia y mantenerlos en el cargo a costa de una inevitable pérdida de imagen. Si la vista oral se desarrolla poco antes del inicio o durante la campaña a las municipales, los efectos para la fuerza conservadora podrían ser devastadores. O hay algo que se nos escapa o a Sebastián Pérez, presidente de la organización y candidato a la Alcaldía, le ha fallado el instinto en el momento cumbre de su carrera de fondo como político. ¡Incomprensible!

El calendario judicial, combinado con el irresistible olor a podrido y la caída libre del PP en el conjunto del territorio estatal, augura, por otra parte, el trasvase de miles de votos a probables plataformas locales y, en muchísima mayor medida, a Ciudadanos, que puede albergar esperanzas de lograr la mayoría relativa si la vieja derecha pierde hasta cuatro representantes en el Ayuntamiento. La decisión también da vida al PSOE y anuncia una sobreexposición fotográfica por parte de Cuenca, quien debería de ir mejorando sus relaciones con otros partidos de izquierda, sin cuya colaboración es casi imposible que repita como alcalde. A IU no tiene por qué afectarle en demasía. Y queda Podemos… sin líder local y con el pie cambiado. La formación morada se ha arregostado a resolver la carajera interna y a improvisar la estrategia, las alianzas y el candidato cinco minutos antes de cada cita electoral.

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