Esta boca es tuya

Antonio Cambril

cambrilantonio@gmail.com

Vallemos la zona Norte

La mudanza de la EOI supondría la conversión en un gueto de uno de los lugares más maltratados de la ciudad

Alumnos y profesores de la Escuela Oficial de Idiomas (EOI), secundados por representantes de algún partido político, han desatado una batalla con huelga asistencial incluida para que el centro se traslade a un lugar distinto del que ocupa actualmente en Almanjáyar. ¿Razones? Los afectados refieren problemas ambientales, escasez de espacio, falta de aparcamientos, lejanía, déficit de transportes e inseguridad, especialmente de las chicas, algunas de las cuales han sufrido acoso sexual. Los argumentos, sólidos y respetables, revelan que se ha empleado con escaso tino el dinero público. Los estudiantes tienen derecho a disfrutar de un edificio adecuado… pero el traslado forzado e inmediato de la Escuela supondría un error estratégico de la Administración al tiempo que una ofensa para la mayoría de los vecinos de ese territorio.

La mudanza de la EOI sentaría un mal precedente, un ejemplo a seguir, y supondría el vallado simbólico, la conversión en un gueto de uno de los lugares más maltratados de la ciudad. Hablamos de la EOI de toda Granada, no de la EOI de los habitantes del Centro de Granada. Los escolares residentes en el casco histórico o en los barrios altos no tienen por qué gozar de mayores privilegios que sus compañeros o que cualquier mujer, trabajador o jubilado de Almanjáyar. La misma distancia hay desde Puerta Real hasta la EOI que desde la EOI hasta Puerta Real. Los mismos autobuses hay para ir que para regresar. Y más riesgo de acoso corre una chica que habite allí que quien se desplaza varias veces a la semana.

Una escuela privada puede instalarse donde plazca a sus dueños y matriculados, pero los poderes públicos han de ir más allá, han de apostar por la paridad de oportunidades de todos los españoles. Y hacer ciudad, lo que implica pensar en términos de reequilibrio social, en los intereses del conjunto de la población, a la hora de emplear las grandes inversiones. Para que Almanjáyar no fuera el lugar "de los vastos jardines sin aurora", la patria de los olvidados, se instalaron allí la estación de autobuses, la Escuela de Magisterio, el parque de bomberos, centros de la Junta o algunas facultades universitarias. No ha sido mal camino. Así que lo pertinente es adecentar la Escuela Oficial de Idiomas, mejorar los sistemas de transporte y reforzar con la máxima celeridad y eficacia la seguridad en el distrito Norte en beneficio de sus habitantes y de los del resto de Granada. ¡Libertad, igualdad, fraternidad!

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