Rosa de los vientos

Pilar Bensusan

bensusan@ugr.es

Con ideas

Quienes hayan demostrado servir a nuestra tierra por encima de cualquier interés merecen absoluto respeto

Leo con sorpresa en un medio digital que en Granada no hay ideas, más que las de siempre…, cuando precisamente son muchas las ideas que desde aquí se llevan aportando para sacar a nuestra tierra de la postergación en la que se encuentra y reconducirla hacia el lugar de progreso que le corresponde. Valgan como botón de muestra las siguientes:

Primera: Los dirigentes locales, autonómicos y estatales electos por la circunscripción de Granada cuyo único oficio sea la política deberían ser cuestionados por los ciudadanos -cuando únicamente nos dejan, en las urnas-, en el caso de que hayan puesto sus intereses personales o partidistas por encima o contra los de Granada y los granadinos, que deberían ser su única prioridad. Quienes hayan demostrado servir a nuestra tierra por encima de cualquier otro interés -enfrentándose a sus partidos o a poder perder sus sillones-, merecen el más absoluto respeto y consideración.

Segunda: Tras 40 años perteneciendo a una estructura autonómica que sólo ha traído agravios y perjuicios evidentes para Granada y los granadinos, es hora de articular una nueva fórmula administrativa de organización de nuestro territorio que nos permita gestionar nuestros propios intereses, recursos, riqueza y patrimonio directamente en beneficio de nuestros ciudadanos. La primera medida ejemplar al respecto es que se devuelvan a Granada la gestión de la Alhambra y de Sierra Nevada.

Tercera: La CE permite conformar una nueva autonomía, que podría asumir las mismas competencias que el resto o que podría devolver algunas al Estado central, que seguro las gestionaría en pro de Granada con mayor diligencia que el régimen de Sevilla.

Cuarta: Que en todos los foros políticos, económicos, profesionales, culturales, etc. se oiga la voz de Granada, una única voz que actúe exclusivamente en beneficio de Granada y luche contra su arrinconamiento sistemático.

Quinta: Que esa "voz" esté formada por todos los ciudadanos que sientan que ha llegado el momento de cambiar las cosas y miren con ilusión hacia un futuro más próspero para Granada, lejos de nuestro decimonónico presente.

Sexta: Que estos ciudadanos se impliquen en el proyecto constructivo de sacar a Granada de la situación de fracaso administrativo, organizativo, institucional, de infraestructuras, etc. en que vivimos.

Séptima: Tras estos 40 nefastos años en manos de dirigentes que nada han dado a Granada, dárselo ahora es ya nuestra responsabilidad, la de los propios granadinos…

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