La tensión en las negociaciones sanitarias para resolver la crisis abierta en Granada es máxima. Pero hay gestos que descolocan aún más en todo este cúmulo de opiniones, actitudes, posiciones y declaraciones. Y algunas no dejan de cara a la ciudadanía en buena posición a las partes. Ayer le tocó a la Administración. La convocatoria de protesta de Candel a la misma hora de la reunión entre Salud y los sindicatos y en el mismo sitio -edificio de Gobierno- hizo que se decidiera cambiar el lugar de la reunión. Un lugar 'secreto' hasta que se terminó el encuentro. Iba a ser en el edificio de Gobierno pero se cambió. Se dijo que si allí no que en la Delegación de Salud y tampoco. Ni a mero título organizativo se informó a la prensa con compromisos de confidencialidad. Todo para defender el clima de la negociación lejos de las presiones. Al final, fue en el PTS. Una actitud que pronto recogió la parte crítica lamentando que los encuentros se hagan de espaldas a la ciudadanía.