En una localidad como Gualchos-Castell de Ferro, donde conviven numerosas nacionalidades, siempre se ha pensado que las actividades deportivas suponían una buena oportunidad para incentivar una buena convivencia. Sin embargo, el campo de fútbol de la población costera de Castell estaba aún hecho de tierra, "en muy mal estado y desde la federación nos estaban poniendo muchos problemas para participar en las competiciones", según relata la alcaldesa de la localidad, Toñi Antequera.

Tras una importante demanda social, después de que el anterior equipo de gobierno prometiera una infraestructura con césped, Antequera comenta que se encontró con "un proyecto redactado (pendiente de pago) sin suficiente partida presupuestaria para llevarlo a cabo". El presupuesto ascendía a unos 500.000 euros, aunque en las cuentas municipales de 2015 sólo se había presupuestado 300.000.

"Como no había ayudas de otras administraciones, optamos por una modificación presupuestaria y solicitar un crédito de 200.000 euros que nos permitiese sacar a concurso la obra", explica la alcaldesa. "Fue un procedimiento largo donde se presentaron 50 empresas y tuvimos bajas temerarias, y en el que finalmente se le adjudicó a la empresa Heliopal con una baja del 36%.

La inversión final ha ascendido a unos 400.000 euros y la obra se ha desarrollado en el plazo acordado de tres meses. En el proyecto inicial (valorado en medio millón de euros) no tenia previstas algunas actuaciones necesarias en el campo y en la zona anexa de entrenamiento, por ello se redactó el proyecto de obras anejas, que ascendía a 60.000 euros. Para esta obra, la Diputación provincial de Granada ha concedido una subvención de 30.000 euros para ayudar a la localidad "en esta gran inversión que hoy es una realidad", según afirmó ayer Toñi Antequera.