Sin contar a Alfaro, cuyo futuro aún está en el aire, ni a Sergio Sánchez, que aún debe pasar pruebas médicas para ir al Málaga, el Sevilla tiene en nómina 28 futbolistas aún. Una auténtica barbaridad para lo que han proyectado los técnicos sevillistas, una plantilla corta, de 21 ó 22 jugadores, en la que puedan hacerles hueco a los futbolistas que vayan despuntando en la cantera. Monchi y Marcelino aún tienen mucha tela que cortar, entre otras cosas porque han de hacerles también un hueco al central y al delantero que buscan para redondear el equipo. Y hoy podrán verse con ambos objetivos: perfilar los descartes y también los dos refuerzos, con más prisa por el central que por el punta.

El director deportivo sevillista participa hoy en un clínic de fútbol para chavales de 13 a 17 años en Gijón, un encuentro organizado por el club TSK Roces en el que coincidirá con el ex técnico sevillista Xabier Azkargorta, Juan Manuel Lillo y el preparador físico del Aston Villa, Rafael González. Evidentemente, Monchi se verá en su viaje a Asturias con Marcelino, que disfruta de su última semana de vacaciones en su tierra antes de ponerse manos a la obra a partir del próximo lunes.

Sólo queda una semana para la vuelta de las vacaciones de los jugadores y los mandamases nervionenses tienen que apremiar en el capítulo de descartes. Actualmente, sin tener en cuenta a los canteranos que estarán entre el primer y el segundo equipo y que irán a Costa Rica, como el meta Dani Jiménez o el medio centro Salva, entre otros, hay 28 futbolistas en nómina, si bien Luis Alberto y Rodri no tienen garantizada aún una ficha con el primer equipo. Se llega a la treintena si en esa lista son incluidos el central y el punta que están por venir.

Aun dejando fuera a estos dos canteranos y a los jugadores señalados como posibles descartes (Dabo, Romaric y Kone) o a futbolistas que quiere ver Marcelino pero que no tienen sitio por ahora (Armenteros o Acosta), aún habría 23 futbolistas en la plantilla.