Sociedad

Air France cambiará las sondas de control de velocidad en los Airbus A330

  • La compañía propone a los pilotos un calendario para cambiar los sensores · La Agencia Europea de Seguridad Aérea asegura que todos los modelos de A330 y 340 son "seguros y aptos para volar"

La compañía aérea Air France pretende sustituir los sensores de control de velocidad en los Airbus A330 y A340 tras los fallos detectados en el aparato que sufrió un accidente en el océano Atlántico y en el que murieron 228 personas. Tras la negativa de los pilotos a volar en estos modelos mientras no se modificaran los sistemas que permiten controlar la seguridad de los aviones en las líneas de largo recorrido, la empresa francesa ha propuesto al sindicato mayoritario de pilotos, SNPL, un calendario para llevar estas medidas a efecto.

Aunque oficialmente no se ha confirmado ninguna de las hipótesis que se barajan como la causa del accidente que costó la vida a los 228 pasajeros del vuelo AF447 entre Río de Janeiro y París, el informe Acars (Aircraft Communications Addressing and Reporting System) enviado por el aparato antes de desaparecer de los radares atestigua fallos en los sistemas anemométricos.

Air France reconoció que desde mayo de 2008 se han venido constatando "incidentes de pérdidas de información anemométrica en altura de crucero" en los A340 y A330. En este momento, la aerolínea gala tiene quince A330 y diecinueve A340.

Por eso, los sindicatos de pilotos solicitaron a la compañía aérea Air France que sustituya las sondas de control de velocidad de los Airbus A330 y A340.

Por su parte, la dirección de Air France confirmó durante una reunión celebrada con los sindicatos de pilotos de la compañía que acelerará el cambio de dichas sondas de velocidad con el objetivo de que toda la flota esté equipada con las nuevas de aquí a finales del mes de junio, según explicó el comandante de vuelo y vicepresidente del sindicato de pilotos Alter François Hamant al diario Le Monde.

Mientras tanto, la Agencia de Seguridad Aérea europea (EASA) quiso tranquilizar a la opinión pública y confirmó ayer que el modelo A330 de Airbus y todos los demás modelos de Airbus están en condiciones de volar y su operación es segura". "De forma preventiva, la agencia emitió ayer un boletín de información que recuerda los procedimientos en vigor en caso de pérdida de informaciones sobre la velocidad o de informaciones no fiables", anunció la EASA en el comunicado.

En referencia a un posible mal funcionamiento de los indicadores anemométricos, los denominados pitot -tubos que tienen como misión calcular la velocidad del avión-, la agencia indicó que está analizando los datos con vistas a crear unas medidas de corrección obligatorias, "sin prejuzgar el resultado de la investigación del accidente".

Mientras, la operación de búsqueda y rescate en mitad del Atlántico está concentrada a unos 440 kilómetros al noreste de Sao Pedro y Sao Paulo, unos peñascos deshabitados ubicados a 1.296 kilómetros de Recife y a 704 kilómetros de Fernando de Noronha, lo que hace más lento y difícil el traslado de cadáveres a tierra.

El portavoz de la Fuerza Aérea presentó ayer las fotografías de una pieza metálica retirada del mar que al parecer es parte de una de las alas del Airbus, pero aclaró que sólo el fabricante tiene capacidad para confirmar a qué parte corresponde.

Además de los seis barcos militares, en las búsquedas participan 570 miembros de la Marina, 265 de la Fuerza Aérea y 14 aeronaves, doce de ellas brasileñas y dos francesas. Las causas del accidente y la búsqueda de la caja negra son de responsabilidad de las autoridades francesas, que han enviado a la zona el submarino Emerade, cuya llegada está prevista para hoy. Por su parte, la Interpol facilitará asistencia en la coordinación de los esfuerzos para identificar las 228 víctimas del accidente, según informaron ayer.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios