Sociedad

El técnico dice que la avería del sensor del MD-82 no afectaba a la seguridad

  • El magistrado que instruye el caso del accidente de Barajas llamó ayer a declarar a tres imputados, que recibieron en la calle el apoyo de un grupo de compañeros

El mecánico de Spanair Felipe G.R., que desactivó el calefactor del sensor de temperatura del avión siniestrado el 20 de agosto en Barajas minutos antes de que el aparato se estrellara, aseguró ayer que esta avería no afectaba a la seguridad del vuelo. Este joven acudió ayer al Juzgado de Instrucción número 11 de Madrid, cuyo titular, el magistrado Javier Pérez, les había citado a él, al técnico de mantenimiento de aeronaves Julio N.B. y al jefe de mantenimiento de Spanair en Barajas, Jesús T.A., como imputados por 154 delitos de homicidio imprudente -el número de fallecidos- y por 18 de lesiones imprudentes -los heridos-.

El día del accidente el avión sufrió una avería en el sensor de temperatura (RAT) en un primer intento de despegue, por lo que el imputado Felipe G.R. lo desactivó, según recogía el juez en el auto. Fuentes jurídicas han señalado que el mecánico explicó que revisó el aparato después de que el comandante del avión detectara la avería en el calefactor del RAT cuando iba a iniciar el primer despegue. Subrayó además que realizó la revisión según el manual de reparación de incidencias a pie de pista y que trasladó el problema a su jefe -una persona que no ha sido aún citada por el juez-, quien le dio el visto bueno para desactivar el fusible, ya que no afectaba a la configuración del vuelo y se podía reparar al llegar a destino. Ambos comunicaron al comandante que la seguridad no se veía afectada, y éste fue quien tomó la decisión última de despegar.

El juez sostiene que Felipe estuvo asistido por el imputado Julio N.B., que fue quien "propuso la decisión de despachar el avión", aunque, según manifestó ayer, en su declaración ante la Guardia Civil, que ha ratificado, relató "lo que le contaron sus compañeros" porque no participó en esa reparación. Por su parte, el jefe de mantenimiento de Spanair, Jesús T.A., indicó que su trabajo consistía en labores de organización del trabajo de cada empleado y no en la reparación.

Los imputados han diferenciado entre el manual de reparación de incidencias a pie de pista -empleado cuando se produce una avería en un avión preparado para despegar- y el manual del fabricante, en este caso Boeing, que es el que se usa para revisar los mecanismos de los aviones, una operación que, según las fuentes, se realiza "cada noche". En este sentido, las mismas fuentes han explicado que, un día antes del accidente, el MD-82 fue inspeccionado según el manual de Boeing y no se detectó ningún error. Por otra parte, Spanair ya ha facilitado la identidad de los técnicos que revisaron los pasados 9 y 18 de agosto el MD-82 siniestrado, días en los que este dispositivo falló.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios