El Cid cuajó una gran tarde en Úbeda tras cortar tres orejas que pudieron ser más de un muy buen lote de Juan Pedro Domecq y ha salido en hombros en el primer festejo de la Feria de San Miguel junto a Morante de la Puebla, que firmó dos faenas estéticas y con muchos detalles en los tres tercios. Curro Díaz en su tierra, también ha paseado una oreja.

El Cid desorejó al buen jabonero que hizo tercero, que quedó muy crudo en el caballo y que llegó a la muleta con mucha calidad en sus embestidas. El de Salteras lo llevó muy toreado por los dos pitones en tandas cortas pero de gran intensidad. Tras pinchazo y estocada, paseó el doble trofeo. De nuevo anduvo a gran nivel toreando sobre los dos pitones y, especialmente en una tanda al natural, al que cerró plaza, un ejemplar con calidad que supo administrar El Cid también en tandas cortas. Sólo paseó una oreja por el fallo a espadas.

Morante paseó una oreja en el cuarto, al que banderilleó hasta en cuatro pares, ya que el tercero, al quiebro, quedó deslucido y el sevillano decidió clavar un último par de dentro a fuera. Ya con la muleta dejó una primera mitad de trasteo de mucha brillantez y estética, pero el conjunto vino a menos. Oreja. Antes cortó una oreja del que abrió plaza, al que lanceó de salida con gusto a la verónica y en un quite por chicuelinas y, ya con la muleta, al natural en muletazos sueltos pero de empaque.

Curro Díaz anduvo fácil en el quinto, ante el que firmó una faena correcta y con momentos de interés. Tras una estocada entera perpendicular el animal cayó de manera inmediata, pero el tercero de su cuadrila con la puntilla, lo que obligó al linarense a usar el descabello y redujo la petición a una oreja.