No todos los cumpleaños son felices. Algunos no recuerdan tiempos mejores, ni grandes momentos de la historia. Pero aún así, aunque hayan dejado a su paso más lágrimas que alegrías, hay días que por justicia deben recordarse. El próximo 7 de febrero se cumplirán 80 años de la mayor tragedia que la Guerra Civil española guarda en su diario negro.

Tal día como ese en 1937, cerca de 150.000 civiles huyeron en desbandada desde Málaga hacia Almería recorriendo la carretera de la costa. Familias enteras de hombres, mujeres, niños y ancianos tuvieron que dejar sus casas para escapar de las tropas franquistas y del mar de represión que llevaban con ellas.

Durante ese camino, que unía las capitales andaluzas, se fueron sumando al éxodo masivo personas de las localidades por las que pasaban, es por eso que a esta marcha se la llamó popularmente 'la desbandá'.

Ayer, fueron la delegada del Gobierno, Sandra García, junto al presidente de la Diputación, José Entrena, y el presidente de la Federación Andaluza de Montañismo, Julio Perea, los encargados de presentar la I Marcha Senderista La Desbandá, organizada para conmemorar el 80 Aniversario de aquel trágico éxodo.

Todas esas personas no merecen el olvido de la historia, y es precisamente por eso que el senderismo andaluz quiere darles un merecido homenaje. La Federación Andaluza de Montañismo, FAM, con la colaboración de la Junta y la Diputación de Granada, presentaron ayer lo que será un viaje en memoria de aquellos andaluces, sobre todo de los que no sobrevivieron a la marcha. Entre 3.000 y 5.000 personas fueron asesinadas por tierra, mar y aire durante el trayecto, ya fuera, por ejemplo, desde barcos de guerra o abriendo las compuertas del Guadalfeo cuando estos civiles pasaban por su cauce.

La primera edición de La Desbandá es una marcha que reivindica la memoria de aquellos pasos en un recorrido de 260 kilómetros divididos en 11 etapas. La salida tendrá lugar en Málaga el día 7 del mes que viene, y su 'meta' estará en Almería.

Esos 260 kilómetros, servirán "para recordar" a aquellos que hace 80 años tuvieron que huir, explicó ayer Julio Perea.

La marcha, organizada por la FAM, visitará a su paso por Granada numerosas localidades entre ellas Almuñécar, Motril, Castell de Ferro y Albuñol, antes de llegar a la provincia almeriense.

Según contó ayer Perea, los participantes, que podrán ser hasta 400 en algunas etapas por razones de seguridad, tendrán las mínimas necesidades para así poder "meterse en la piel" de aquellos andaluces.

Aún así, durante el itinerario estarán junto a los senderistas una ambulancia, el cuerpo de Protección Civil y un coche de avituallamiento para asegurar que todo salga rodado.

La organización tiene programado realizar tres homenajes a lo largo de las 11 etapas, uno en cada una de las provincias protagonistas. Así el primero será el día de partida en Málaga a las 13:30, antes de la salida oficial. En éste se hará un homenaje a Henry Norman Bethune, doctor canadiense protagonista en este éxodo por su implicación en el socorro y el traslado de refugiados.

Para el día 11 de febrero, en la localidad de Salobreña, se llevará a cabo el segundo recuerdo, esta vez a las personas supervivientes del episodio del río Guadalfeo y el tercero tendrá lugar en Almería, cuando la FAM descubrirá una placa conmemorativa de la I Marcha de SenderismoLa Desbandá.

Sandra García valoró que "comprender el drama de la desbandá nos tiene que servir para revisar el presente y diseñar mucho mejor el futuro, porque las imágenes de guerra y dolor unidas a ese éxodo de 1937, nos recuerda a las muchas que vemos actualmente en Europa".

Por su parte, Julio Perea añadió que "los caminos son las arterias de la historia y es nuestro trabajo recuperarlo". Al hilo de esto adelantó que desde la FAM pretenden que se homologue de manera oficial este sendero de la memoria, y que previsiblemente se conseguirá a final del próximo año 2018.