La actriz sevillana Ana Fernández será la protagonista esta noche de la gala inaugural de Alcances. Recibirá el premio de la Asociación de Festivales del Audiovisual Andaluz (ASFAAN), que con ella comienza una nueva línea de reconocer la trayectoria de "mujeres de nuestra tierra que se hayan distinguido en el arte cinematográfico", pero siempre en consonancia con el rigor frente a la comercialidad. Ella está "muy contenta". Asegura que lo recogerá "muy emocionada" y "pensando que estaré siempre agradecida porque me lo hayan dado a mí precisamente".

-¿Qué supone recibir tan joven un premio a su trayectoria?

-Es la segunda vez que me pasa en este año, porque el Festival de Cine Europeo de Sevilla me premió también. Pues te quedas un poco..., yo me lo he tomado más como un reconocimiento hacia la década que se cumple precisamente ahora de mi trabajo en cine. Solas la hice en 1998, se estrenó en 1999 y estamos en 2009, justo hace 10 años que estoy en esto de hacer cine. Y en este tiempo he hecho también televisión, teatro y algún que otro documental como guía o presentadora. Más que una trayectoria, yo prefiero dejarlo en celebración de una década porque hay gente que tiene una trayectoria muchísimo más larga, más compleja y completa que la mía.

-Además, son reconocimientos en su tierra.

-Eso me emociona. Y Cádiz especialmente. Mi amor está en Cádiz, yo me pierdo en Cádiz desde que lo conozco. Hay playas que son el lugar donde yo encuentro la paz y la tranquilidad y cargo pilas. Y el gaditano es muy especial. Se une la vitalidad, el humor, la sabiduría..., me gusta mucho. Pero mucho, mucho. De Cádiz me gusta cómo se come, me gusta el trato, la luz, me gusta como huele... Me gusta todo de Cádiz. Y bueno, que sea el primer año que se entrega este premio también me emociona, porque me siento un poco la madrina y eso me gusta. Y luego, que también se premie a Saura, que es un maestro, me parece muy emocionante compartirlo el mismo año.

-¿Había estado antes en este festival?

-No, es la primera vez. Y voy a aprovechar para quedarme unos días. Mi pareja sí que conoce Alcances y sé que me está preparando un itinerario cultural y gastronómico. Ya tengo organizada una visita para el día siguiente. Mi hermano pequeño también viene a acompañarme.

-¿Qué le parece la apuesta por el documental que hace Alcances?

-Lo apoyo. El documental cuenta historias y mi misión es también estar dentro de historias que se cuentan a través de imágenes. Los documentalistas ahora ya tienen una mirada y se posicionan. De hecho, a la vista está, hace poco han matado a Christian Poveda, un periodista que ha muerto por haber hecho un documental que se llama La vida loca. Entonces, que se apoye este tipo de trabajos me parece fundamental, me parece que alimenta al cine en general, porque es cine. Es fantástico. Yo soy espectadora de documentales desde que era pequeña. Y cuando te he dicho que he trabajado en documentales te lo digo con todo mi cariño porque, por ejemplo, yo tenía el sueño de ir a conocer Pompeya y gracias a un documental en el que trabajé, conocí Pompeya. Luego, he trabajado en cine partiendo del documental que hizo Llorenç Soler sobre una pareja de lesbianas, que una de ellas quería ser madre. O sea, que yo al documental también estoy muy ligada y no sólo como espectadora.

-Usted se dio a conocer por Solas y ha participado en películas taquilleras, pero sobre todo en cintas independientes, algo que Alcances valora en este premio.

-En estos años he hecho unas 30 películas y sí, estoy muy vinculada también a la opera prima. Son proyectos que en principio me interesan especialmente. Y luego, estoy muy vinculada a Sudamérica. Lo digo porque Cádiz también está muy ligada a esa parte del mundo, tenéis un festival de teatro que es magnífico, aparte de la historia que os liga. He trabajado en Venezuela, en Chile, en Argentina. Y son trabajos que me llenan por todo lo que el proyecto encierra pero también porque me permiten vivir y acercarme un poquitín a otra cultura que está bastante cercana a la mía, siendo diferente. Y eso yo creo que es magnífico porque también me da la posibilidad de crecer como persona y conocer a gente, y de todos esos trabajos siempre hay alguien que te va a quedar para siempre. Son los nuevos buenos amigos. Y todo esto me lo está dando el cine y meterme en proyectos arriesgados.

-¿Qué proyectos tiene ahora entre manos?

-Estoy pendiente de estreno de alguna película. Una con Enrique Gabriel, que se llama Vidas pequeñas, y otra película venezolana que se titula Cuidado con lo que sueñas, que ya está terminada y ojalá llegue a España. Es el primer largometraje de Geyka Urdaneta, una chica que ha hecho varios cortos y tiene varios premios en su país. También, la segunda parte de la miniserie La Mari, que se pondrá este año en las cadenas autonómicas.