La Guardia Civil anunció ayer la detención de 16 personas en el Campo de Gibraltar al integrar presuntamente una organización criminal dedicada al contrabando de tabaco. Según detalló en un comunicado el instituto armado, el operativo, denominado operación Simio, se inició cuando fue detectado un grupo dedicado al contrabando de tabaco procedente de Gibraltar y Marruecos. La mercancía era introducida en España para su posterior distribución a localidades de las provincias de Cádiz y Málaga.

La cúpula de la organización, compuesta por cinco personas, encargaba y compraba la mercancía a proveedores de origen. Además, proporcionaba los vehículos necesarios para llevar a cabo el transporte y la infraestructura para asegurar la guarda y custodia de la mercancía. Para ello contaban con garajes y viviendas de su propiedad, donde almacenaban el tabaco. El resto de los integrantes eran los encargados de la distribución del tabaco.

Una vez se acordaba la compra de la mercancía en origen, los distribuidores se trasladaban hasta el lugar, bien a Tánger (Marruecos) bien a Gibraltar, en un vehículo proporcionado por los cabecillas.

Estos vehículos contaban con dobles fondos realizados en la estructura, accionados con apertura electrónica para obstaculizar así la labor policial.

Ya en el lugar, el tabaco era introducido en los dobles fondos y una vez los vehículos eludían los controles policiales de las aduanas de La Línea de la Concepción y del puerto de Algeciras, era trasladado hasta unos almacenes. Desde allí distribuían el tabaco a diversas localidades de las provincias de Cádiz y Málaga.

La cúpula de la organización supervisaba los itinerarios, proporcionando seguridad en el trayecto, para lo que contaba con un dron con cámara para alertar de la presencia policial a los distribuidores que realizaban los trayectos.

En el transcurso de la operación se intervinieron 60.000 cajetillas de tabaco de contrabando tanto en los registros domiciliarios realizados como en las intervenciones realizadas en los trayectos de distribución de la mercancía, y ocho vehículos con dobles fondos realizados.

En los seis registros domiciliarios realizados en Algeciras, Los Barrios y Málaga también se intervino una escopeta de caza con 176 cartuchos, propiedad de uno de los detenidos, un dron con cámara incorporada cuyo propietario carecía de licencia, abundante material informático y 23.000 euros en metálico. Los investigadores estiman que la organización habría defraudado unos tres millones de euros a la hacienda pública.