El Algarrobico no tiene sólo un frente judicial. El frente político volvió a calentarse ayer, con los partidos políticos echándose en cara el problema y culpándose unos a otros de lo que ocurre en la playa de Carboneras (Almería). El PP andaluz reaccionó subrayando el "ridículo espantoso" de la Junta por culpar al Gobierno de las ayudas al proyecto del hotel. Su portavoz en el Parlamento, Carlos Rojas, reprochó a la consejera de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio, María Jesús Serrano, sus acusaciones al Gobierno del ex presidente José María Aznar de subvencionar el hotel de Azata del Sol en el Algarrobico cuando es la Junta la responsable de "promover, solicitar, tramitar y controlar" estas ayudas.

Serrano afirmó el día anterior que fue el Ejecutivo de Aznar el que en 2002, con Rodrigo Rato como ministro de Economía, subvencionó el hotel con 2,8 millones de euros y no la Junta de Andalucía. "Impresentable", fue el término empleado por Rojas para definir que la consejera de Medio Ambiente "eche la culpa a los demás". Rojas atribuyó estas afirmaciones de Serrano al "rosario de incompetencias" que viene llevando a cabo el Gobierno autonómico en todo lo relacionado con la gestión de hotel en el Algarrobico. El dirigente popular subrayó que "no se sostiene" lo dicho por Serrano porque, en su opinión, todo el proceso de "presentación de la solicitud, trámite y promoción" de la subvención al hotel "son competencia regional".

Rojas recordó que el PP-A solicitó la comparecencia de la consejera con el fin de que explique todas las gestiones llevadas a cabo por su departamento y aclare "cuánto va a costar este rosario de incompetencias a los andaluces" por parte del "incompetente" gobierno socialista.Cuestionado sobre cuál es la posición del PP-A respecto a la demolición o no del complejo hotelero, Rojas recalcó que su formación "está siempre a favor de que se cumpla la legalidad, y lo que ésta determine será lo que habrá que hacer. Si es legal la demolición y se puede producir, así habrá que hacerlo, en cumplimiento de la legalidad", zanjó el portavoz del PP-A.

La coordinadora provincial de IU en Almería, Rosalía Martín, criticó el "juego político" del PP con respecto al Algarrobico, en Carboneras, porque, después de pronunciarse a favor del derribo "dos días después", el portavoz adjunto del PP en el Congreso, Rafael Hernando y el presidente del PP en Almería, Gabriel Amat, "hablan de abrirlo. Es el juego político al que nos tienen acostumbrados".

Para Martín, ese "juego" responde a intereses "económicos o es cuestión de algún cabezón del PP. Y cuando las cosas responden a intereses económicos y no a intereses ciudadanos se manipulan y se va cambiando de versiones", denunció la dirigente de IU. Respecto a la postura de quienes quieren que se abra el hotel porque crearía puestos de trabajo, Martín dice que "no crearía tantos puestos de trabajo como la gente piensa y perjudicaría al comercio y la hostelería de Carboneras".

El portavoz del Grupo Parlamentario Socialista, Mario Jiménez, devolvió la pelota a Rojas y aseguró que "es el PP andaluz el que hace el ridículo y pretende enmendar en agosto su desastre de oposición".