Andalucía

La Policía sitúa la hora del crimen entre las ocho y las diez de la noche

  • Esta línea de investigación descarta que la menor regresara a su domicilio como había asegurado el asesino confeso

La Policía sitúa el crimen de Marta del Castillo entre las ocho de la tarde y las diez de la noche del pasado 24 de enero, fecha desde que se había producido su desaparición. Esta línea de investigación descarta, por tanto, que la menor pudiera haber regresado a su domicilio sobre las nueve y media de la noche, como había sostenido hasta ahora el ex novio de la joven y asesino confeso, Miguel Carcaño Delgado.

De la reconstrucción de los hechos que sucedieron aquella tarde, no se discute que Marta salió de su casa sobre las cinco de la tarde del sábado 24 de enero y, tras pasar algún tiempo cerca de su domicilio, en la barriada de Tartessos, quedó con Miguel, con el que había mantenido una relación de poco más de un mes dos años atrás. Se sabe que Marta comentó a su madre que tenía que "arreglar un asunto con Miguel", aunque no dio más detalles sobre qué tenía que tratar con él.

Tras pasar varias horas con Miguel, ambos coincidieron con un amigo de Marta que es bordador, con el que estuvieron departiendo hasta las ocho y cuarto de la tarde junto al puente de Triana. La Policía cree que después se marcharon al domicilio de Miguel en la calle León XIII, al que el joven solía llevar a muchas chicas, según dijeron sus vecinos. En este domicilio ubican el escenario del crimen los investigadores, aunque otras fuentes apuntan a que la muerte pudo producirse en la vivienda de su amigo Samuel Benítez, también imputado.

Los indicios apuntan a que entre Miguel y Marta se inició una violenta discusión, en el transcurso de la cual el asesino confeso cogió un cenicero y le asestó varios golpes hasta causarle la muerte. El crimen pudo cometerse antes de las diez y cuarto, porque a esa hora la madre de Marta, preocupada por su ausencia, llamó a su teléfono pero el móvil estaba apagado.

La actual novia de Miguel confirma que llegó a su casa, en Camas, pocos minutos antes de las once de la noche. Y la madre de Marta logró contactar con Miguel pasadas las doce de la noche, momento en que el joven le comentó que no sabía nada de su hija. Los investigadores creen que el asesino salió de nuevo de esta casa, porque fue visto sobre la una de la mañana manipulando la silla de ruedas que se empleó para el transporte del cuerpo.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios