Mariano Rajoy ha decidido tirar de sus antiguos alcaldes de capitales, aquellos que obtuvieron una victoria insuficiente en las elecciones de mayo, para encabezar las listas de las generales del 20 de diciembre. Juan Ignacio Zoido será el primero en la lista de Sevilla; Teófila Martínez, en Cádiz; José Enrique Fernández de Moya, que aún es alcalde de Jaén, dimitirá para ir al Congreso, y José Antonio Nieto encabezará la nómina cordobesa. José María García Urbano, alcalde de Estepona, encabeza la lista de Málaga, desplazando a Celia Villalobos al número dos de la lista. De los números uno, cambian cinco de ocho y Villalobos, que se había convertido en uno de los indicadores de la renovación, pasa a un segundo puesto.

El presidente del PP andaluz, Juanma Moreno, consigue una renovación entreverada en el Congreso, aunque los clásicos resisten en otros puestos o en el Senado. Así, Gabino Puche, uno de los diputados con más años en el Congreso, se presentará a la Cámara Alta por Jaén, mientras el alcalde de Algeciras, José Ignacio Landaluce, también deja la carrera de San Jerónimo por el Senado.

Villalobos, diputada desde 1989, se había convertido para la dirección popular andaluza en la llave que mostraría si había renovación o no, y en este sentido lo consigue, pero sólo desde un punto de vista formal al no ser cabeza de cartel. Celia Villalobos cumplirá 30 años de permanencia en el Congreso. La malagueña, que ha sido alcaldesa y ministra, aceptó esta propuesta de Rajoy, consciente de que Moreno Bonilla necesitaba salvar la cara en este asunto. La ministra Fátima Báñez encabezará la lista de Huelva, mientras Cristóbal Montoro, que se presentó por Sevilla en 2011, irá por Madrid.

Javier Arenas se queda fuera de la propuesta popular para las generales. El que fuera líder del PP andaluz se quedará como senador por designación autonómica, pero no se presentará a las elecciones. Rajoy y Arenas llegaron a esta opción que permite al presidente del PP optar por líderes provinciales en circunscripciones donde son conocidos y tienen un éxito relativo. En el caso de este partido, es el propio presidente del Gobierno quien escoge a las personas que encabezan las listas provinciales, aunque formalmente es el comité nacional electoral el que los nombra.

Arenas tenía la posibilidad de presentarse tanto por la provincia de Sevilla como por la de Almería, pero tras una conversación con Rajoy, ambos decidieron no tapar a ninguno de los candidatos más locales. Zoido ganó las elecciones municipales en Sevilla, si bien no gobierna por un acuerdo de la izquierda. Y en Almería, Rafael Hernando, portavoz en el Congreso, es un cunero de cierto raigambre. Es natural de Guadalajara, pero lleva décadas haciendo política en la provincia oriental.

Carlos Rojas liderará la lista del PP por Granada, por lo que deberá dejar la portavocía en el Parlamento andaluz. Fuentes de la dirección del PP explicaron que Rojas, que ha sido alcalde de Motril, es la persona con mejor índice de popularidad en el partido en la provincia, donde hay unos pocos votos pueden decidir si el cuarto escaño es para el PP o el PSOE. Pero, además, el salto de Rojas deja el puesto de portavoz vacío en la Cámara autonómica, lo que le viene bien a Juanma Moreno para nombrar a una persona de su círculo más cercano. Rojas llegó al Parlamento de la mano de Arenas, y ejerció de portavoz durante el mandato de Juan Ignacio Zoido en el grupo parlamentario.

El líder del PP andaluz consigue, además, que Fernández de Moya y José Antonio Nieto dejen la presidencia del partido en Jaén y Córdoba. Ninguno de los dos formaba parte de los nuevos dirigentes que llegaron con Moreno Bonilla.