Los jueces sevillanos celebrarán el 21 de octubre una Junta General para rechazar las "injerencias" de los políticos y las "presiones" sobre el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) para que eleve la sanción al juez Rafael Tirado por no encarcelar al presunto asesino de la niña Mari Luz.

La Junta de Jueces coincidirá con la huelga de tres horas convocada para ese mismo día por los secretarios judiciales de toda España y medios judiciales no descartan que también se convoque una huelga de funcionarios, que este jueves empezaron a reclamar unos pasquines pegados en las paredes de la Audiencia y juzgados de la capital sevillana.

El juez decano, Federico Jiménez Ballester, ha explicado a Efe que el objetivo de la Junta de Jueces, al igual que las que se celebrarán en otras provincias, es respaldar el comunicado emitido el pasado miércoles miércoles en Cádiz por los jueces decanos de toda España.

En dicho documento, los jueces decanos mostraron su "rotundo rechazo" a las "constantes injerencias" de los responsables políticos en las facultadas disciplinarias que "competen exclusivamente" al CGPJ.

Los jueces calificaron de "intolerables las indicaciones sobre la sanción concreta que debería imponerse según su particular criterio" al juez Tirado, y añadieron su confianza en que el Consejo General del Poder Judicial "esté a la altura de las circunstancias como máximo garante de la independencia judicial".

Los decanos dijeron que "las críticas vertidas pretenden, básicamente, ocultar responsabilidades del poder político en la secular carencia de medios personales y materiales para afrontar la abrumadora carga de trabajo que soportan los juzgados".

Jiménez Ballester ha indicado que aún no se ha fijado el lugar de la reunión pero se citará a los jueces de toda la provincia sevillana.