Prisión provisional, comunicada y sin fianza y una valoración psiquiátrica. Esta es la medida impuesta por el Juzgado de Instrucción número 4 de Granada, en funciones de guardia, al joven que la mañana de este viernes se presentó en la empresa Manufacturas Químicas Aquasol de Albolote y asestó varias puñaladas a una empleada, heridas que horas después finalmente acabaron con la vida de la trabajadora, de solo 29 años, cuando permanecía en estado crítico en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) del Hospital de Traumatología. El joven, que como avanzó Granada Hoy, se trata del hijo del propietario de la empresa, tendría alguna patología mental que se podría haber visto agravada por su consumo de estupefacientes.

Los hechos tuvieron lugar la mañana del pasado viernes 5 de febrero, cuando pasadas las 10:30 horas, Emergencias recibió el aviso de que la empleada de la citada empresa había sido herida de varias puñaladas en el pecho. Según pudo saber este periódico, el agresor, de 34 años, se presentó muy alterado en el establecimiento, comenzó a romper cosas y exigió la entrega de dinero. La víctima, que desde hace poco menos de un año había tomado las riendas de la empresa debido a una enfermedad del dueño que lo mantiene ausente, se habría negado a la petición, tras lo que el joven la agredió.

Con la víctima malherida, pero aún con vida, el agresor abandonó la empresa familiar, situada en la calle Trevélez con Paseo de Colón del Polígono Juncaril de Albolote, y trató de refugiarse en un domicilio, al parecer de su madre, en la Urbanización Villas Blancas de Albolote. Precisamente en este lugar fue donde se produjo la detención, a la cual trató de oponer resistencia al persistir el estado de nerviosismo con el que irrumpió en la empresa antes del ataque, ya que los empleados conocían perfectamente al atacante al tratarse del hijo del dueño. Este punto, precisamente, hizo que se descartaran las hipótesis de robo o de violencia de género, ya que no mantenía ninguna relación sentimental con la víctima.

Como la víctima aún permanecía con vida -fue trasladada al centro hospitalario granadino donde fue intervenida de urgencia-, en un principio al agresor solo se le acusaba de un delito de homicidio en grado de tentativa, así como de resistencia a la autoridad. Si bien, la joven, que estuvo durante más de ocho horas debatiéndose entre la vida y la muerte, finalmente acabó falleciendo en el hospital a consecuencia de las lesiones causadas por las puñaladas recibidas en el pecho.

Este hecho hizo que el arrestado, que fue trasladado hasta los calabozos de la Comandancia de la Guardia Civil de Granada capital, pasase a ser acusado finalmente de homicidio. Así lo ratificó el juez la mañana de este sábado, cuando pasó a disposición judicial, que también le atribuye el delito de resistencia a la autoridad, delitos por los que lo ha enviado a prisión provisional. Además, el magistrado también ordenó que se le someta a una valoración psiquiátrica por parte de los servicios médicos de la cárcel, mientras que la causa ha sido inhibida en favor del Juzgado de Instrucción número 3, que proseguirá con la investigación.