Crítica 'El último cazador de brujas'

Diesel sin plomo

el último cazador de brujas. Fantasía-aventuras, EEUU, 2015, 107 min. Dirección: Breck Eisner. Guión: M. Wallack, C. Goodman. Intérpretes: Vin Diesel, Rose Leslie, Elijah Wood, Michael Caine, Isaach de Bankolé.

No conviene despreciar a Vin Diesel así como así, por eso hemos ido a ver su última película con visos de franquicia, para hacerlo con argumentos. En efecto, Diesel no tiene reparo en vestir pellizas de polypiel y ponerse postizos capilares para viajar al siglo XII en un prólogo medieval que nos anuncia que las brujas llegaron para quedarse. Como no hay quien aguante en ese paisaje de Juego de Tronos de cartón piedra digital, El último cazador de brujas viaja de nuevo hasta el presente, a Nueva York, para seguir enfrentando al inmortal Diesel, ahora en vestuario sport, con su cabeza rapada y soltando frases lapidarias, con las brujas que se esconden, bajo diversas formas y con permiso de la iglesia, entre nosotros.

A su lado, no crean, tenemos a un Michael Caine sin escrúpulos, emulando su papel de viejo sabio en los Batmans de Nolan, al gran Isaach de Bankolé con lentillas de colores y a un Elijah Wood que es siempre garantía de aroma de serie B con pretensiones.

Con su tono altisonante, su despilfarro virtual y sus chistes de sacristía, El último cazador de brujas se empantana en su odisea por el submundo de las sombras, los árboles siniestros y las plagas milenarias, con una imaginería de prestado que Breck Eisner no consigue domar ni estabilizar en ningún momento. Lo peor es que continuará.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios