Tralala | Estreno en Filmin

Canciones y milagros

Mathieu Amalric en una imagen de esta comedia musical ambientada en Lourdes.

Mathieu Amalric en una imagen de esta comedia musical ambientada en Lourdes.

Dentro de la estimulante programación inédita del Atlántida Film Fest que puede verse durante este próximo mes en Filmin, Tralala, de los hermanos Arnaud y Jean Marie Larrieu (Pintar o hacer el amor, Los últimos días del mundo), prolonga esa reescritura del género musical del cine moderno francés (de Demy a Honoré pasando por Resnais, Ozon, Ducastel y Martineau) al servicio de una historia de retornos, suplantaciones y milagros ambientada con amable aire paródico en la mismísima y beata ciudad de Lourdes de donde son originarios los cineastas.  

Hasta allí llega un desaliñado trovador vagabundo (extraordinario Mathieu Amalric) atraído por una joven virginal que ha conocido fugazmente en las calles de París, pretexto para un peregrinaje vital y emocional puntuado por los falsos reencuentros, las canciones e interludios musicales que van presentando a los personajes y la particular familia adoptiva de una trama de folletín, confusiones consentidas y espejismos que, a pesar de sus mimbres de comedia, por momentos también romántica, no deja de tener un trasfondo que remite al western en sus figuras, gestos y trayectos primordiales y en su tono crepuscular y melancólico.

El repertorio adaptado de chansons contemporáneas de Dominique A, Bertrand Belin, Jeanne Cherhal, Étienne Daho o Philippe Katherine sirve de hermoso y juguetón flujo narrativo a una fábula que progresa a veces con cierta tendencia a lo derivativo, aunque reconducida finalmente hacia esas emociones que desdoblan ese pequeño y liviano milagro laico que convoca y anuda ausencias, le da cuerpo al tiempo perdido y fabrica nuevas ilusiones.