Vecinos de la urbanización Minasol, en el barrio de Taramay de Almuñécar, han solicitado la intervención del Ayuntamiento sexitano y de la propia justicia, tras la ocupación de unas viviendas situadas en el barrio, según denuncian, hace escaso un mes, y que carecen de las preceptivas licencias de habitabilidad, una falta de permiso que ha sido confirmado a este periódico por el propio Consistorio. 

El concejal de Urbanismo del Ayuntamiento de Almuñécar, Javier García, ha indicado que, inicialmente la promotora presentó un proyecto para estas seis viviendas, que estaba conforme a ley, y comenzaron a realizarlas con la correspondiente licencia de obras en base a lo planteado, pero una modificación "externa" tanto al Consistorio como al promotor, por un pleito mantenido con una urbanización contigua por el acceso a las viviendas, ha motivado que en base a una sentencia judicial se queden sin acceso por el vial. Una falta de servidumbre de paso, entre otros problemas, que impide que se les dé el permiso de ocupación. Así mismo, señalan que en el caso de algunas de las viviendas, las colindantes con la carretera, presentan un problema de alineación. 

Un problema de acceso a las viviendas que desde el Ayuntamiento de Almuñécar consideran que se debe solucionar llegando a un entendimiento entre el promotor de las viviendas ocupadas y la comunidad de vecinos de Minasol.

Por su parte, los vecinos han indicado a Granada Hoy que han presentado varios escritos solicitándo al Ayuntamiento que tome las medidas oportunas para que se cierren las puertas y ventanas de este edificio, "como marcó una sentencia que es firme del Juzgado de instrucción número dos de Almuñécar de diciembre del 2011", algo que aseguran tuvieron que hacer ellos mismos con anterioridad. Y se le repercuta el gasto que se ocasione por este cierre al promotor de estos inmuebles. Así como que se tomen las medidas necesarias para la desocupación de las viviendas, dado que no reúne todas las condiciones adecuadas de habitabilidad.

De igual forma consideran que en la zona se está generando un clima de "tensión, inseguridad, intranquilidad e indefensión" entre los vecinos que residen allí a consecuencia de este conflicto. Y que en las viviendas, que carecen de permisos de ocupación, se están supuestamente efectuando enganches ilegales a la red eléctrica con la consiguiente peligrosidad, tanto para las personas que lo han ocupado ilegalmente como para el resto de edificaciones colindantes. 

Una situación que ha sido apoyada por Convergencia Andaluza, que ha destacado que "el Ayuntamiento no puede mirar para otro lado, ya que cuenta con los medios legales a su alcance para dar una solución al problema".