La Guardia Civil ha investigado y puesto a disposición judicial a un hombre de 29 años como presunto autor de un delito relativo a la protección de los animales domésticos, al descubrir que estaba dejando morir de hambre y de sed a su perro en una terraza de la barriada de Torrecuevas de Almuñécar.

Fue un testigo el que alertó a los agentes de la Benemérita de que llevaba varias semanas viendo a un perro en unas condiciones lamentables en la terraza de una vivienda cercana.

La patrulla del Seprona de la Guardia Civil de Motril acudió al domicilio donde estaba el perro y comprobó que se trataba de un can de la raza american staffordshire terrier extremadamente delgado que se movía entre basura y excrementos, sin comida ni agua, y al que se le estaba cayendo el pelo de los cuartos traseros y de la cola.

Los agentes desplazados comprobaron además que el animal carecía del preceptivo microchip identificativo.

El Seprona ha hecho entrega del perro a la asociación protectora de animales SOS Animales de Salobreña, y esta se hizo cargo de la custodia y el cuidado del animal.

La Guardia Civil localizó después al propietario del perro y lo han puesto a disposición judicial como investigado por un presunto delito de abandono de animales doméstico.