Una de las peores situaciones que se pueden dar al ir a disfrutar de un tranquilo día de playa es la de que los más pequeños dejen de estar a la vista de sus padres o familiares, algo que puede ocurrir en cuestión de segundos y que puede suponer una verdadera angustia. Por ello, un año más, el Ayuntamiento de Salobreña ha puesto en marcha una iniciativa pionera con la que se pretende poder localizar al menor lo antes posible en cualquier playa del municipio.

Se trata de una iniciativa única en el litoral granadino, con la que el Consistorio de la Villa, junto a la Ferretería Neptuno, como miembro de la Unión de Cerrajeros Andaluces de Seguridad (UCAS), repartirá algo más de 5.000 pulseras identificativas para hacer de las playas un lugar más seguro y en el que no se tenga ningún problema para poder localizar a cualquier menor que se despiste o se pierda.

El concejal de Playas de Salobreña, Gabriel Alonso, ha resaltado que se está trabajando para que el litoral salobreñero sea "lo más seguro posible" y, gracias a este servicio se podrá facilitar el trabajo de vigilancia de las playas.

Alonso ha reseñado que en las pulseras se mostrará el nombre del niño y un teléfono de contacto, por lo que la localización en caso de extravío del menor será mucho más rápida. Los padres pueden recoger la pulsera, apuntar el nombre del niño y el teléfono en el espacio destinado a ello, y colocársela sin dificultad.

Las pulseras de seguridad para niños son totalmente gratuitas, auto adhesivas e impermeables por lo que admiten el baño sin ningún inconveniente, estando disponibles en los módulos de Protección Civil, en la propia ferretería y en la tienda Paco Franco de la playa.

El responsable de Ferretería Neptuno, Silverio Jiménez Molina, ha explicado que si bien otros años lo ha hecho su negocio de manera particular, en esta ocasión la iniciativa parte de UCAS, siendo Salobreña la primera localidad de la Costa Tropical en adherirse a esta iniciativa que está disponible para todos los municipios que lo soliciten a través de dicha entidad.

Este simple procedimiento ya en años anteriores ha ayudado a los socorristas de la zona a localizar a varios niños que se habían despistado de su zona de baño y que, gracias a que portaban la información de sus padres en el brazo, los pudieron identificar rápidamente.