La Policía Nacional ha detenido en Motril a un varón de nacionalidad española y origen marroquí de 35 años, al cual le constan antecedentes policiales, como presunto responsable de un delito de tráfico de drogas, tras haber sido sorprendido por una patrulla policial cuando se encontraba realizando una venta de hachís a un individuo que se encontraba a bordo de un vehículo deportivo. Los agentes de policía se han incautado de seis tabletas y dos medias bellotas de hachís, de las que intentó deshacerse tras ser localizado, con un peso total cercano a los 600 gramos.

La detención del presunto autor tuvo lugar cerca de las seis de la tarde en la zona de El Varadero de la localidad de Motril. En dicho lugar, los agentes de policía observaron como el detenido, que se encontraba de pie junto a un vehículo deportivo estacionado en una calle sin salida, entregaba un objeto al copiloto de dicho vehículo, haciendo este último el gesto de acercárselo a la nariz para olerlo.

Tras observar este comportamiento, los policías contemplaron la posibilidad de que se tratase de una venta de sustancia estupefaciente, lo que les indujo a intervenir. Uno de los agentes se bajó del coche en el que circulaban con la intención de identificar a estos individuos, siendo entonces cuando el presunto autor emprendió la huida a la carrera. Tras una breve persecución el detenido se introdujo en un garaje con la intención de despistar a los policías, siendo interceptado por uno de ellos al tiempo que se desprendía de una tableta de hachís arrojándola al suelo.

Seguidamente, tras inspeccionar sus ropas, los agentes encontraron otras cinco tabletas de similares características y composición a la de aquella de la que había intentado desprenderse momentos antes. Además, en el bolsillo derecho del pantalón se encontró media bellota de la misma sustancia, semejante a la que había entregado anteriormente al ocupante del vehículo deportivo.

El pesaje posterior de las seis tabletas de hachís junto a las dos medias bellotas de la misma sustancia arrojó un peso cercano a los 600 gramos. Tras dicha comprobación, el presunto autor, un español de origen marroquí de 35 años de edad, con antecedentes policiales, fue detenido y trasladado hasta las dependencias policiales de Motril. El presunto autor ya ha sido puesto a disposición de la autoridad judicial.