El Barcelona Regal buscará esta noche (21:00) en el Palacio de los Deportes de la Comunidad de Madrid una victoria que cure la herida que ha dejado abierta la derrota en el primer partido de la final de la Liga ACB.

La posible falta a Sada a 2,3 segundos de la conclusión y con 73-72 en el marcador, así como la supuesta permisividad arbitral al Real Madrid en el último cuarto fueron muy criticadas por los azulgrana al final del primer encuentro (76-72). Pero errores arbitrales aparte, lo cierto es que el Barça desperdició una ventaja de 12 puntos en el último período y perdió una gran oportunidad de dar la sorpresa a domicilio.

Si bien los catalanes estuvieron tremendamente acertados en el tiro exterior (47 por ciento en triples con una serie de 8 de 17), echaron en falta una mayor aportación ofensiva de sus hombres interiores. Entre Tomic, Mavrokefalidis, Lorbek y Wallace sólo sumaron 18 puntos y el equipo notó su falta de protagonismo en los momentos en que a sus tiradores les abandonó la inspiración.

Si el Barcelona desea que hoy no le suceda lo mismo no puede permitirse de nuevo perder la batalla del rebote, especialmente el ofensivo, donde el Madrid se ha revelado este año como el claro dominador de la Liga. En este primer partido, los blancos capturaron nada menos que 16 rebotes en ataque, diez más que los azulgrana. Eso le permitió maquillar sus discretas estadísticas en el tiro y concederse nuevas oportunidades de anotar, especialmente en los minutos finales, donde un par de capturas de Felipe Reyes resultaron determinantes para doblegar la resistencia catalana. El gran partido de Sergio Rodríguez y Llull, máximos anotadores del primer choque con 21 y 19 puntos, respectivamente, también fue decisivo.

Pablo Laso y Xavi Pascual habrán analizado todas las aristas del primer partido y saldrán dispuestos a mejorar sus prestaciones y a reducir las del rival, pero después llegarán los pequeños detalles. Sin olvidar, la labor de los colegiados, que serán mirados con lupa.