El Estudiantes dio la sorpresa de los cuartos de final de la Copa del Rey al eliminar al vigente campeón, el DKV Joventut, en un encuentro agónico hasta el final, donde los colegiales tiraron de casta para vencer y sellar su pase a unas semifinales donde les espera el Unicaja de Málaga.

A la tercera fue la vencida, como había asegurado en la previa Luis Casimiro. Dos veces se habían visto las caras esta temporada colegiales y verdinegros, con partidos igualados donde se había terminado impuesto la calidad de los de Badalona, pero esta noche en su cancha y ante su afición los del Ramiro se olvidaron de su puesto en la tabla para plantar cara al actual campeón.

Los colegiales, anfitriones de esta Copa del Rey, no querían defraudar en su regreso cuatro años después a la cita copera y durante casi todo el choque se movieron por delante en el marcador, aunque el encuentro estuvo marcado por la igualdad, tanta que al descanso los guarismos eran de empate a 34.

Con intensidad comenzó el tercer cuarto, con un Estudiantes más enchufado, pero Ricky Rubio se encargó de que los madrileños no cogieran una renta importante.

Mediado el último acto, los verdinegros se pusieron por delante, pero el MMT no desfalleció y no sólo igualó el marcador (67-67), sino que le dio la vuelta.