El Bayern Múnich aplastó 5-0 como local al Eintracht Frankfurt y dio otro paso a un nuevo título en la Bundesliga, donde suma ya un impactante récord de 44 partidos consecutivos sin perder y una ventaja de 13 puntos en el liderato.

La goleada en el último partido de la jornada 19 ante el Frankfurt, décimo cuarto, permitió al equipo de Josep Guardiola recuperar la ventaja que había reducido provisionalmente su perseguidor, el Bayer Leverkusen, al ganar el sábado 2-1 al Stuttgart.

Las cifras del campeón alemán y europeo ya forman parte de la historia. No pierde desde octubre de 2012 y sumó 17 partidos consecutivos ganando en su estadio. Esta temporada lleva 51 goles a favor y nueve en contra. Además, ningún otro equipo había sumado 53 puntos en la jornada 19.

"Estoy muy contento. Fue la mejor actuación del equipo esta temporada", celebró Guardiola tras la victoria. El técnico rival, Armin Veh, admitió también la supremacía bávara: "Hay que reconocer sin envidia que el resultado fue justo. No había visto un Bayern tan potente en los últimos dos años".

A diferencia del anterior partido de Liga, cuando Thiago logró una sufrida remontada en el tiempo de descuento ante el Stuttgart, el Bayern dominó ayer con tranquilidad desde el inicio y evitó cualquier susto a los 71.000 espectadores que colmaron el Allianz Arena, muchos de ellos cantando un "campeones de liga en marzo" que no parece a estas alturas una utopía.

Los bávaros volvieron a ejercer la receta de posesión abrumadora y presión adelantada que Guardiola imprime en sus equipos y disfrutaron de otra exhibición de Thiago, ineludible en la distribución del juego y en la transición al ataque del Bayern.

Su partidazo se plasmó en un nuevo récord: el ex del Barcelona tocó 185 veces el balón, más que ningún otro jugador antes en la historia de la Bundesliga, y superó la marca de su compañero del Bayern Bastian Schweinsteiger (157). "Es un jugador fantástico", dijo Matthias Sammer.