El Covirán Granada perdió este miércoles por 71-75 ante el Acunsa guipuzcoana en el Palacio, derrota que no impide que el equipo nazarí se mantenga líder y siga dependiendo de sí mismo para subir a la ACB, pero que confirma que lograrlo no va a ser camino de rosas al desperdiciar el margen de error que tenía.

Tras la sensacional e importante victoria del domingo ante el Movistar Estudiantes, el Covirán Granada salió muy enchufado al partido ante Acunsa, pese a no poder contar con el concurso de Ramón Vilá, con un imponente 12-2 en los primeros tres minutos.

Los vascos, sin embargo, no se dejaron intimidar y, poco después, cambiaron radicalmente el panorama del choque con un parcial de 2-14 que les permitió acabar por delante el primer cuarto (22-25).

El cuadro dirigido por Pablo Pin anotó los mismos puntos (17) en los cinco minutos iniciales que en los quince siguientes hasta alcanzar el descanso, al que llegó Acunsa siete puntos arriba (34-41).

Lo que no pudo hacer el Covirán en el segundo cuarto, que fue recortar diferencias y retomar la delantera, lo hizo en el tercero a base de tirones en forma de parciales a favor.

Un 9-0 para pasar del 36-43 al 45-43, un 5-0 para intentar escaparse en el electrónico (52-47) y un 6-0 para buscarlo de segundas (58-51), pero los visitantes no se fueron del choque en ningún momento y se entró en los diez minutos finales con un equilibrio casi máximo (60-58).

Minutos decisivos

Era evidente que el Covirán no tenía ni la frescura, ni la claridad ni el acierto ofensivo de otros duelos, lo que Acunsa aprovechó para acercarse al triunfo (64-69 con menos de cuatro minutos por delante y obligado tiempo muerto de Pin).

Los tiros libres permitieron a los granadinos mantenerse en el choque hasta el final, aunque Simmons no falló con los dos últimos que lanzó para dar el triunfo a los vascos.

Lluis Costa, con 18 puntos, fue el mejor jugador del Covirán Granada en el encuentro.