El Covirán Granada perdió en Melilla en un partido condicionado por la escasez de efectivos del cuadro que dirige Pablo Pin, que sólo pudo contar con ocho jugadores de la primera plantilla.

Tanto Joan Pardina como Christian Díaz continúan de baja, mientras que James Ellisor fue baja de última hora al encontrarse con coronavirus.

En una liga tan competida y tan igualada como esta LEB Oro, contar con tan pocos jugadores disponibles puede condicionar. De hecho, casualidad o no, el conjunto que dirige Pablo Pin mandó en el primer tiempo y llegó a colocarse con trece puntos de ventaja en el electrónico, pero sucumbió en el segundo, seguramente fruto de su incapacidad para aguantar el ritmo de los locales.

No es ningún chasco ni ninguna tragedia perder un partido, y menos aún teniendo en cuenta las condiciones en cuanto a efectivos en que lo tuvo que afrontar el equipo y que enfrente, encima como local, había un equipo bueno y peligroso como Melilla, que esta campaña ha ganado más encuentros de los que ha perdido.

Acaba de empezar

El bagaje actual del Covirán Granada es positivo y le da para mantenerse en la zona noble de la clasificación. Ha perdido y perderá más. Lo anormal es ganarlo casi todo, como estaba ocurriendo hasta ahora.

La competición no ha hecho más que empezar. Diez jornadas de 34 que tiene la fase regular, y luego unas eliminatorias finales por delante. Ni un tercio de la primera fase por delante, y luego lo que de verdad importa.

El curso es exigente, largo y duro. Lo que sí tendría que analizar el conjunto granadino, no por perder en Melilla sino por la citada exigencia y todo lo que queda por delante, es la necesidad de incorporar a alguien que complete la plantilla y evite situaciones de escasez de efectivos como la de este domingo, ocurridas también en algunas jornadas anteriores.

Viene el coco

Llega el sábado al Palacio el Movistar Estudiantes en el choque, posiblemente, más atractivo y esperado de la temporada.

Con la intención de conseguir un lleno, o un casi lleno en la instalación, el club posibilita de cada abonado retire entradas para familiares o amigos a cinco o diez euros.

Puede ser un gran preámbulo para la fiesta de la Copa de dentro de unos meses. O para un partido que ojalá a disputarse la campaña venidera en una categoría superior.