Pocos podían imaginar cuando allá por finales de agosto el Covirán Granada empezó a trabajar que en el mes de diciembre tuviera un balance de seis victorias y cuatro derrotas, a dos triunfos del liderato y con una renta de tres sobre el último equipo que descendería. Pero los de Pablo Pin se están mostrando como un conjunto sólido, con una gran rotación como le gusta a su entrenador y que, exceptuando el choque ante el filial del FC Barcelona, ha competido en cada cita.

Duro diciembre

Los rojinegros tienen una nueva oportunidad para demostrar que se encuentran en un gran momento en el arranque de un mes en el que deberá disputar cinco encuentros, tres de ellos a domicilio en los que se medirá, entre otros, al Real Betis Energía Plus, Iberojet Palma o Bilbao Basket. Pero antes, quieren sacar adelante el encuentro de este domingo (19:00 horas) ante el Carramimbre CBC Valladolid, conjunto que en su debut la pasada temporada en LEB Oro logró meterse en play offs aunque cayó claramente en cuartos de final ante el CB Prat, actual colista de la categoría.

Si algo ha buscado Pin y su cuerpo técnico desde que está al frente del Covirán es que su equipo no dependa de nadie sobre todo a nivel ofensivo. Y si se analizan los números de los granadinos hasta el momento, esta premisa se cumple casi a rajatabla. Hasta cinco jugadores distintos han sido los máximos anotadores en las diez jornadas que se llevan disputadas, algo que no pueden decir muchos equipos.

Carlos de Cobos será una vez más una pieza clave en el Covirán ante Valladolid.

Un ejemplo

Aunque sin duda, si el técnico rojinegro se tiene que quedar con un partido, éste puede ser el que se disputó el pasado martes en el Palacio de Deportes ante La Coruña. Un duelo en el que los doce jugadores de la plantilla aportaron, sumando todos ellos valoración positiva, logrando la máxima anotación hasta el momento (93 puntos), y encajando tan sólo 59 (otro récord). Capturando además 17 rebotes ofensivos, dando 22 asistencias, teniendo el mejor porcentaje en tiros libres hasta el momento (88%) y sumando un total de 122 puntos de valoración en conjunto. Ahí es nada.

El bloque entrenado por Paco García cuenta con un tridente muy peligroso que si tiene su día puede causar estragos

Pero no siempre se podrán realizar partidos como ante los gallegos y el Covirán lo sabe, por lo que hay que poner los pies en la tierra para medirse esta tarde a un rival con un balance de 5-5, del nivel de los rojinegros, pero que acumula tres derrotas consecutivas, No obstante, en casa es un conjunto fiable pues únicamente ha caído derrotado en una ocasión, ante Orense.

El rival

El bloque entrenado por Paco García, todo un clásico del baloncesto nacional, cuenta con un tridente muy peligroso que si tiene su día puede causar estragos. Se trata de Jonathan Kazadi, base-escolta que es el tercer máximo anotador del equipo; Gregory Gantt, escolta que promedia 12,4 puntos por partido con un 45,1% de acierto desde más allá de 6,75 y su referencia interior, el veterano Sergio de la Fuente. Un jugador que anota 13,5 puntos, captura 7,3 rebotes, recibe 3,7 faltas y suma 13,5 de valoración cada fin de semana. Ya en LEB Plata siempre le generó problemas a los granadinos. Además, el base Óscar Alvarado es otro de sus piezas claves, siendo el segundo máximo asistente de la categoría y su jugador más valorado. Un jugador de equipo que impone el ritmo que más le conviene a sus compañeros y que es la extensión de Paco García en la cancha.

En el tercer encuentro de la semana, el cansancio puede ser un elemento decisivo y de hecho hay jugadores del Covirán que llegan tocados aunque finalmente todos estarán disponibles. Tan sólo Josep Pérez se perdió el entrenamiento del jueves por un fuerte dolor de cabeza, pero será de la partida.