El Covirán Granada recibe este sábado al Girona con una sensación agridulce. Por un lado, el equipo de Pablo Pin está instalado en una buena dinámica de juego tras haber encadenado dos triunfos consecutivos, pero por otro lado, la situación placentera con la que se comenzó a preparar el encuentro ante la escuadra catalana se torció el pasado miércoles al conocerse el positivo en Covid-19 de Alejandro Bortolussi.

Este hecho provocó que se tuviera que interrumpir los entrenamientos hasta la tarde de este viernes, una vez que se conoció que el resto de jugadores habían dado negativo en los test PCR que se realizaron por la mañana. Fue entonces cuando se confirmó que el partido ante el Girona se va a jugar (Palacio de Deportes, 16:15 horas) y que el Covirán va a tener la oportunidad de aprovechar la inercia en la que está  para elevar hasta tres el número de victorias seguidas.

El Covirán quiere seguir en lo alto

Armas

Aunque el conjunto rojinegro va a afrontar el choque sin haber completado las sesiones de entrenamiento que estaban inicialmente previstas. No obstante, los de Pablo Pin intentarán hacer valer el buen momento de juego que atraviesan y que han demostrado con creces en sus dos últimos enfrentamientos ante el Murcia y el Canoe, ante los que ofreció unos demoledores inicios.

El equipo de Carles Marco cuenta con un plantel competitivo que necesita reaccionar

En ataque, la principal arma de los nazaríes radica en el hecho de que casi todos los jugadores amenazan y si, además, están finos desde más allá de la línea de 6,75, pocos rivales pueden aguantarles el desafío. Atrás, la defensa, el gran empeño de Pablo Pin, se muestra cada día más efectiva gracias a la implicación de todos lo que están en pista.

Bamba Fall es la referencia bajo los aros

Lo que sí quiere evitar el técnico granadino es el exceso de confianza de los suyos ante el hecho de que el equipo de Gerona no ha comenzado bien la temporada (sólo ha ganado un partido). El Covirán es favorito pero, evidentemente, tiene que demostrarlo en la pista.

Un triunfo esta tarde dejaría al Covirán bien situado (tras cinco jornadas es segundo del Grupo B de la LEB Oro) de cara a la próxima semana en la que no habrá competición por ‘abrirse’ una de las ventanas FIBA. Por lo tanto, habrá tiempo para recuperar a Bortolussi y preparar a conciencia su próximo partido, que será un duelo por todo lo alto en la pista del hasta ahora intratable Alicante.

Un rival complicado

El equipo granadino tendrá enfrente a un conjunto que aunque no ha comenzado bien la temporada de su debut en la LEB Oro sí presenta un plantel con buenos jugadores y en el que algunos de ellos atesoran mucha experiencia. El equipo dirigido por Carles Marco y presidido por Marc Gasol sólo ha ganado un partido, el de la segunda jornada que disputó en la pista del Palma. Dos de sus tres derrotas han sido ante dos de los gallitos del grupo como son Alicante y Castelló. En ambos casos, los partidos se decidieron con un marcador apretado.

En el equipo lleva la batuta todo un veterano como Albert Sabat, un base con experiencia ACB que además es el máximo anotador de su equipo. En el interior las referencias son Ryan Logan y sobre todo Davis Rozitis, que ha sido uno de los mejores jugadores en las pasadas temporadas.