Desde los primeros compases de la temporada el Covirán Granada no encadena dos victorias consecutivas y desde la cuarta los hombres de Pablo Pin no saben lo que es ganar lejos del Palacio de Deportes.

Con el reto de volver a poner a cero el contador de estos datos negativos, el conjunto rojinegro visita esta tarde la pista del Oviedo, un conjunto que, al igual que el granadino, está por debajo de lo que se esperaba y que necesita el triunfo para salir de la zona de descenso en la que está situado (es decimosexto en la tabla).

La concentración será vital en Oviedo

La escuadra granadina busca dar continuidad a su juego, pues en lo que va de temporada aún no ha dado en la tecla para salir de la irregularidad en la que está inmerso. Tras desaprovechar hace dos semana la salida a Almansa, donde sufrió un severo repaso, el Covirán vuelve a tener una oportunidad para lograr su segunda victoria foránea de la temporada. El rival es un Oviedo que busca enderezar su camino tras un paupérrimo inicio de campaña, en el que sólo ha sumado tres victorias tras las once jornadas disputadas.

La concentración, vital

Para este importante encuentro, Pablo Pin cuenta con todos sus efectivos salvo Alo Marín. El jugador, que fue el más destacado del Covirán el pasado domingo en el encuentro ante el Castelló, se ha caído de la convocatoria tras sufrir un fuerte golpe en un brazo durante el entrenamiento del pasado martes tras chocar con Guille Rubio y tener una mala caída. Los servicios médicos del club han diagnosticado un esguince en la articulación acromioclavicular del brazo izquierdo, lo que ha obligado al escolta gaditano a quedarse en casa.

Los ovetenses jugarán motivados tras ganar en Lérida con siete jugadores el partido aplazado de la cuarta jornada

El conjunto nazarí quiere evitar que se repita la historia de lo acontecido en Almansa, por lo que será vital mantener la concentración durante los 40 minutos para evitar que el rival ponga tierra de por medio. Y es que el aspecto mental será primordial porque habrá momentos en los que habrá que mantener las cabezas frías. Además, los jugadores del Covirán tendrán que cumplir la consigna de su entrenador y ser duros en defensa en un partido que, dadas las características del rival, será muy físico.

Earl Watson, un pilar en el juego interior

Una pista complicada

Una de las principales armas del Oviedo están en las características de su pista. Pumarín es un pabellón pequeño en el que la afición aprieta mucho. Además, el equipo de Javi Rodríguez está con la moral muy alta tras el triunfo que logró el pasado martes en Lérida en el partido aplazado de la cuarta jornada que afrontó con sólo cinco jugadores de la primera plantilla y dos canteranos.

El conjunto asturiano recibe al Covirán con las dudas de sus hombres interiores como son Oliver Arteaga y el ex jugador nazarí Devin Wright. La ausencia de ambos, si se produce finalmente, sería una baza que los granadinos deberían aprovechar.

Por el contrario, el Oviedo ha incorporado recientemente a Devis Geks y Jorge Sanz. El madrileño es uno de los bases de referencia de la LEB Oro mientras que el letón reforzará el juego exterior del conjunto dirigido por el experimentado Javi Rodríguez.