Los tenistas españoles Juan Carlos Ferrero y David Ferrer protagonizaron las primeras buenas noticias de la jornada de ayer para la Armada al clasificarse para la segunda ronda del torneo de Wimbledon, en un día en el que se despidieron sus compatriotas Iván Navarro, Óscar Hernández y Lourdes Domínguez Lino.

Ferrero dio un primer paso en firme al saldar con victoria la primera ronda e imponerse al ruso Mijail Youzhny por 6-3, 7-6 (3) y 6-3. El valenciano, que ha entrado en esta edición del torneo con una invitación especial realizada por la organización, se medirá en la próxima ronda con el francés Fabrice Santoro, que venció en la jornada disputada ayer al alemán Nicolas Kiefer.

Ferrer, por su parte, comenzó su andadura con un triunfo en cuatro mangas ante el estadounidense Kevin Kim (7-5, 6-3, 4-6 y 6-2) que le permite olvidar la decepción de haber perdido su puesto en el top 20 de la ATP. El alicantino, que la semana pasada se quedó en los cuartos de Hertogenbosch y no pudo defender título, se mostró demasiado irregular, cometiendo hasta 30 errores no forzados, pero tiró de experiencia para solventar la primera ronda. Su próximo rival será el italiano Fabio Fognini.

También fue positiva la victoria de Anabel Medina sobre la polaca Marta Domachowsa, ante la que remontó el primer set para salir airosa de la primera ronda (3-6, 6-3 y 6-4).

Peor fueron las cosas para Iván Navarro, que cayó tras un maratón de cuatro horas y 11 minutos ante el rumano Victor Hanescu por 6-3, 6-7(5), 6-4, 6-7(5) y 12-10. Y Óscar Hernández fue barrido de la pista por el joven tenista argentino Leonado Mayer, 64 del ranking, al que sólo hizo tres juegos (6-0, 6-0, 6-3).

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