El español Javier Gómez Noya consiguió ayer su segundo título mundial de triatlón, el primero en el nuevo formato por etapas.

Gómez Noya efectuó una nueva exhibición y sólo cedió el triunfo parcial a Brownlee -a quien sucede en el historial de la competición- en una prueba que se decidió en la carrera a pie, que fue la que acabó dándole la vuelta entera a la segunda edición de las Dextro Energy World Series.

Ganador del último Mundial de Vancouver, Javier Gómez Noya vuelve a proclamarse vencedor en el último suspiro. Comenzó el campeonato perdiéndose por lesión la primera prueba (en Sydney); debutó en la segunda, en Seúl; comenzó a rodar con el cuarto puesto de Madrid y 'enchufó' la directa a partir de la cuarta prueba, al ganar en Hamburgo el pasado 17 de julio. Seis días después, volvía a exhibirse, esta vez en Londres venciendo en casa de Brownlee.

Gómez Noya debía salir a ganar en Budapest y esperar un fallo del alemán Frodeno. Y como era de esperar, el español no falló, algo que hizo el teutón.

Controlando la carrera de principio a fin, el gallego se mantuvo en cabeza desde el segmento de natación. En la sexta vuelta y tras bajarse de la bicicleta, Gómez Noya ya sabía que era el nuevo campeón del Mundo.

Su exhibición aportó un nuevo éxito a la mejor racha de toda la historia del deporte español en el plano internacional. España también tiene un hombre de hierro.