El Melilla-Granada CF de la primera vuelta pudo ser disfrutado en directo a través de la pequeña pantalla por todos los granadinos que conectaron con la Televisión Municipal, TG7. La señal de aquel encuentro fue producida por Televisión Melilla y mandada por satélite a su homóloga granadina, que se coprometió a ofrecer el mismo servicio en el encuentro de vuelta, para que el choque de hoy pudiera verse en directo en Melilla. Sin embargo, y tras una petición efectuada por el presidente del club rojiblanco, Quique Pina, TG7 no cumplirá con su palabra -el acuerdo fue verbal y se basó en la confianza mutua- y no le cederá la señal a la tele melillense. La razón oficial ofrecida por el club rojiblanco es que "la entidad cree conveniente que no es el partido más idóneo para que se transmita por televisión". La indignación en Melilla es considerable.

Este diario conoció ayer la versión de todas las partes. Según el consejero delegado de la Televisión Municipal granadina, Juan García Montero, la negativa parte de la petición realizada por Quique Pina y el boicot a la transmisión se lleva a cabo para "salvaguardar los intereses del club al que apoyamos". Según el político, "desde el club nos han dicho que lo más conveniente para salvaguardar los intereses del Granada CF es no hacer uso de los derechos de transmisión que tenemos, y es nuestro ánimo colaborar en todo lo que nos pidan". Así, García Montero, asegura que se ha comprometido con los responsables de la televisión melillense a "ofrecerle la señal de otro partido del Granada CF o de algunoq ue dispute el Melilla en la península". Se podría dar el caso, pues, que TG7 movilizara a sus equipos y personal para producir una transmisión fuera de Granada en la que no estuviera implicado el equipo rojiblanco, algo que parece un dislate.

En Melilla no salen de su asombro y consideran que el Granada CF tiene "preparada una encerrona al Melilla", en palabras del gerente de Televisión Melilla, Juan José Medina. Éste acusa directamente a Quique Pina, aunque también lo hace con los responsables municipales que están al frente de la televisión. Según Medina, "Pina ha advertido al Ayuntamiento de Granada con echarle la afición encima si este partido se ofrecía para Melilla, advertencias que han surtido efecto casi llegando a la amenaza a responsables vinculados al gobierno local granadino, quienes han preferido no tener problemas con el tal Pina a costa de perjudicar a los melillenses, impidiéndoles ver el partido de su equipo". A juicio del responsbale de la tele melillense, esto "desmerece sin duda el ejercicio de las responsabilidades políticas en representación de un pueblo y en los compromisos éticos que se adquieren con otros representantes, que pactan acuerdos en beneficio de las aficiones".

Fue en la noche del viernes cuando García Montero comunicaba a su homólogo la decisión. Según Medina, "no estamos ante un caso de rivalidad deportiva, no es problema entre televisiones, la verdadera cuestión es que un presidente de un equipo de fútbol puede imponer sus sospechosos modos de actuación a todo un Ayuntamiento que representa la voluntad del pueblo de Granada".