El holandés Ronald Koeman decidió ayer desatar una revolución para atajar la crisis del Valencia y sus dos primeras víctimas fueron dos pesos pesados de la plantilla: los españoles Santiago Cañizares y David Albelda, capitán del equipo. El técnico quiere prescindir de ambos jugadores y ya les comunicó que empiecen a buscarse otro equipo, aunque el holandés aseguró que la decisión es "de momento" para los dos próximos partidos.

Desde que Koeman asumió el puesto de entrenador en noviembre, su equipo sólo ha sumado un triunfo en ocho encuentros y lleva 580 minutos sin marcar un gol. Cañizares, de 38 años, y Albelda, de 30, son dos de los jugadores con más peso en el equipo, por lo que sorprendió que el técnico los dejara fuera de la lista de 20 convocados para los dos próximos partidos, de Copa del Rey y de Liga.

"De momento es para estos dos partidos, luego ya habrá tiempo de pensar en el futuro", dijo Koeman enigmático. "Son decisiones que se toman por algo, quiero cambiar cosas y dar oportunidades a otros jugadores". El técnico, que llegó comenzada la temporada tras la destitución de Quique Sánchez Flores, aseguró tener el apoyo del presidente, Juan Soler, pero advirtió que la decisión es suya. "Las decisiones las tengo que tomar yo y no ellos. Son decisiones fuertes en las que el presidente está de acuerdo, pero hay que tomarlas".

La apuesta de Koeman, que llega además en un momento en el que el equipo está plagado de lesiones, determinará sin dudas el futuro del técnico en el Valencia. Si consigue construir un equipo fuerte sin los dos jugadores, entonces saldrá como un héroe. Si, por el contrario, el equipo continúa mostrándose tan inconsistente como ahora, seguramente Koeman dejará la ciudad pronto recordado como el hombre que se deshizo de dos veteranos cuando el equipo los necesitaba.

Cañizares y Albelda son dos de los jugadores más populares y exitosos en la historia del club, por lo que nadie esperaba su salida por la puerta de atrás, en el mercado de invierno. El guardameta no tuvo peor manera de celebrar ayer su cumpleaños. Después de casi diez años en el club, con el que ganó dos Ligas y una Copa UEFA, Cañizares era un hombre muy querido. Albelda es más que un idolo para los aficionados, es el capitán durante los gloriosos años de 2002-2004, el chico de la casa que desoyó las ofertas de Real Madrid y Barcelona.

La decisión de Koeman también puede acabar salpicando al presidente del club. El máximo mandatario está también bajo el ojo del huracán en Valencia, donde la afición le culpa de dirigir la entidad con rumbo errático. Desde que Soler se hizo con el control del club en 2004, gracias a los millones de la empresa familiar de construcción, el equipo no ganó ningún título, así que el dirigente necesita que la 'revolución Koeman' funcione.