Fútbol

Lombán agua la noche (1-1)

  • El cuadro de Caparrós suma un punto en el Martínez Valero cuando tenía los tres en su cartera. Una jugada de estrategia evita que los rojiblancos ocupen la segunda plaza.

Si hay un rival al que le tiene tomada la medida el Granada CF es el Elche. Un año más, los rojiblancos sacaron algo positivo de su visita al Martínez Valero pese a que el triunfo estuvo muy cerca tras el tanto de Fran Rico en el minuto 81. Un partido serio de los granadinos que no supieron culminar con una victoria que le habría aupado al segundo puesto de la tabla.

Joaquín Caparrós, que realizó cinco cambios en relación al duelo de la primera jornada, apostó por el doble pivote pese a que durante la semana ensayó con tres hombres en el centro del campo. La entrada de Iturra en la medular, en detrimento de Héctor Yuste, le dio la consistencia que no se tuvo ante el Deportivo de La Coruña. Fran Rico intentó ser el canalizador mientras que Piti y Rochina partieron de las bandas aunque buscaron asociarse en numerosas ocasiones por dentro. Pero fue la entrada de Success, que debutó en Primera, la principal novedad del once. El nigeriano, que sigue en edad juvenil, es muy del agrado del míster que no dudó en darle una oportunidad pese a que en el banquillo tenía a Ortuño o Machís, y en Granada dejó a Jhon Córdoba. Un mensaje más a la plantilla para que no se duerma en los laureles.

Arrancó el choque con ritmo aunque fue el Granada CF el que quiso llevar la iniciativa. Sin embargo la intención le duró poco dado que fue el Elche el que se acercó primero al arco rival y con polémica, al menos para los seguidores locales. Un centro de Rodrigues desde la derecha al segundo palo lo remató Coro cortando Nyom el cuero con el pecho pese a que la grada pidió penalti (4'). Tres minutos después, fue Jonathas el que obligó a Roberto a enviar a córner tras una jugada de estrategia. Segundo aviso de un equipo que a base de empuje encerró a los de Caparrós en su campo con faltas laterales saques de esquina. Jonathas, solo en el primer palo, pudo adelantar a los de Escribá de cabeza en un inicio de partido que desesperó al utrerano en el banquillo.

La intensidad era ilicitana y el balón también. Piti y Rochina no eran protagonistas y cuando tienen que trabajar atrás no están tan cómodos como cuando el cuero pasa por sus pies. Pero sin apenas quererlo, Success pudo adelantar a los rojiblancos tras un disparo desde la frontal con la zurda pero quiso ajustar tanto el cuero al palo derecho de Tyton que se le marchó fuera.

Hasta el ecuador del primer acto el choque se tornó aburrido, situación que se encargó el caboverdiano Rodrigues de cambiar. Un saque de esquina del Granada CF botado por Piti terminó con una contra iniciada por el jugador ilicitano que, cual Usain Bolt, arrancó desde su propio campo y ganó en velocidad a todos los jugadores rojiblancos que se encontró por el camino. Gracias a su explosividad se plantó solo ante Roberto pero el guardameta de Chantada supo aguantarle en el uno contra uno evitando el tanto del extremo local. Un nuevo susto que sirvió a los de Caparrós para despertar.

Y lo hicieron con un envío en largo que la zaga local no logró despejar que aprovechó El Arabi, desaparecido hasta el momento, para hacerle un sombrero a Tyton y, a puerta vacía, disparar pero Enzo Roco, lanzándose al suelo, sacó bajo palos cuando el cuero iba al fondo de la red (31').

Los últimos cinco minutos de la primera mitad fueron vibrantes. Una buena presión en la salida del balón del Granada la aprovechó Jonathas para disparar duro a la base del palo izquierdo de Roberto pero el gallego, muy serio en todo el partido, sacó una buena mano a córner. A la salida del mismo, y tras un nuevo error en la defensa granadina de la estrategia, Enzo Roco a la media vuelta y completamente solo en el punto de penalti lanzó alto. La respuesta de los rojiblancos no tardó en llegar tras una falta de Fran Rico que la puso al corazón del área para que El Arabi la dejara a Success en boca de gol pero Mosquera, muy atento, evitó que se rompiera el empate antes del descanso. Finalizaba así una primera mitad repleta de arreones ofensivos por parte de ambos equipos.

Tras el asueto, y ante los problemas de Sissoko para frenar la velocidad de Rodrigues, Caparrós lo dejó en el vestuario dando entrada a Foulquier. Un claro mensaje a la dirección deportiva para que en el día de hoy, en el que se cierra el mercado, Pina y su equipo hagan un esfuerzo por incorporar a un lateral izquierdo específico.

Fran Rico, de falta, obligó a los cuatro minutos de la reanudación a trabajar a Tyton. Una declaración de intenciones que unida a una mayor velocidad en la circulación y mayor intensidad en la presión hacían que se viera un Granada mucho más incómodo para su rival. En el primer cuarto de hora apenas hubo ocasiones de gol por ambos bandos y sí muchas interrupciones en el juego. Había más espacios pero menos elaboración. El cansancio comenzaba a hacer mella y las ideas no eran fluidas. Success, el jugador más joven en la historia en debutar en Primera con el Granada CF, batió en el 69' a Tyton pero el nigeriano estaba en claro fuera de juego pese a definir con maestría. Siete minutos después Iglesias Villanueva anuló un tanto de Babin a saque de esquina al considerar que el golpeo de Piti salió antes de que el central francés alojara el cuero en la red del portero polaco del Elche. Mucho más cómodos que los de Escribá, los rojiblancos veían que podían adelantarse en el marcador y lo hicieron tras una gran combinación en Fran Rico y Success que el delantero nigeriano, dentro del área, supo esperar el momento para devolvérsela al gallego que, sin apenas ángulo, batió por bajo a Tyton.

Al igual que sucedió ante el Deportivo, Caparrós ordenó enfriar el choque con más posesión y pérdidas de tiempo y lograr así la segunda victoria pero una mala defensa de una jugada de estrategia permitió a Lombán establecer el empate con el tiempo cumplido. Durante nueve minutos se estaba a la estela del Barcelona en la tabla pero no se pudo culminar. Se sigue invicto y creciendo, que es lo realmente importante. Otra vez será.

 

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