Carolina Marín disputará la final de los Campeonatos de Europa en el pabellón que lleva su nombre, donde sus paisanos se darán cita para apoyarla. La onubense logró el pase a la ronda definitiva tras derrotar a Mia Blichfeldt, cabeza de serie número 3, por 21-17 y 21-16 en 47 minutos.

La danesa comenzó con el brazo más suelto que Marín y se destacó 4-9, colocando a la vigente campeona en la situación más comprometida de todo el torneo. No le faltó entonces el aliento redoblado de su gente para mejorar.

Tras el 7-11 del descanso, la andaluza logró recortar hasta el 12-13, pero un fallo de saque le impidió igualar. Intercalaba errores con remates brillantes, pero enfrente tenía a una Blichfeldt muy rápida, regular y segura.

Finalmente, Marín logró igualar el marcador (15-15). Poco después ya se puso por delante en los dos primeros errores notorios de su rival (17-18). En estos instantes claves, la campeona estuvo firme y su adversaria no, por lo que tomó ventaja en la semifinal y puso el 21-17 en 25 minutos.

En el segundo set, Marín, reforzada por lo logrado en el primero, se sintió más segura y comenzó con un 4-1 y un posterior 7-2, jugando de manera arrolladora.

Blichfeldt estaba repleta de dudas ante una española que crecía de remolino a ciclón por momentos para apuntarse el 9-2. Bailaba a su rival con siete puntos de diferencia y quizá por exceso de confianza se dio un respiro, viendo reducida su distancia.

Pero no tardó en volver a apretar para sellar su pase a una de las finales más soñadas de su carrera.