Si no media un imprevisto en el Circuito de Barcelona, donde se espera una temperatura algo más baja respecto a la de ayer, los Mercedes están en condiciones de firmar un nuevo doblete, el cuarto consecutivo de la temporada. La clasificación del Gran Premio de España evidenció que nada ha cambiado, en alusión al punto de inflexión del que siempre se habla cuando el Gran Circo llega al Viejo Continente. Todos han traído mejoras, pero los bólidos alemanes continúan intratables, con una ventaja de más de un segundo respecto a sus rivales.

Por cuarta vez, la pole fue para Lewis Hamilton, quien espera romper con su particular maleficio -pues nunca ha ganado en el trazado español- y asaltar el liderato, aún en manos de su compañero, Nico Rosberg.

También aguardan su ocasión los Williams, después de un interesante fin de semana de Valtteri Bottas, que partirá cuarto, al lado de Daniel Ricciardo (Red Bull).

Fernando Alonso arrancará séptimo, justo por detrás del otro Ferrari, el de Kimi Raikkonen. El año pasado, el asturiano dio la campanada al ganar la carrera saliendo detrás de la segunda línea, un hecho inusual en este trazado, donde la pole suele ser sinónimo de victoria.

El pesimismo de Alonso parece estar justificado, ya que la distancia con los Mercedes resulta casi insalvable, a menos que se produzca un abandono o una salida de pista. Esto último no se descarta, pues todos los pilotos se han quejado del poco agarre que tienen los neumáticos aquí y de los contravolantes que tienen que hacer.

La gran decepción de la jornada la firmó el vigente campeón del Mundo, Sebastian Vettel, quien está realizando la travesía por el desierto esta temporada, y que vivió en Barcelona un verdadero punto de inflexión, pero en clave negativa. Si el viernes fue un problema con el cableado en el nuevo chasis, y un cortocircuito lo apartó de los entrenamientos cuando sólo había rodado cuatro vueltas, ayer no pudo completar la tercera sesión por problemas en la caja de cambios. Al verse obligado a sustituirla, fue sancionado con cinco puestos en parrilla, por lo que saldrá decimoquinto.

Mejor suerte tuvo su compañero, Daniel Ricciardo, que partirá tercero y con opciones de hacer algo importante en una carrera tras el podio que consiguió en Australia y que le fue arrebatado por sanción. Ricciardo ha logrado dos cuartos puestos en las dos últimas pruebas.

Williams, Lotus y McLaren colocaron sus coches entre los 10 primeros: Bottas saldrá en la segunda línea junto a Ricciardo, mientras que Romain Grosjean lo hará al lado de Raikkonen. Jenson Button arrancará octavo y Felipe Massa, noveno. Pastor Maldonado, que estrelló su Lotus al inicio de la Q1, no pudo marcar tiempo y partirá último.