El FC Barcelona accedió ayer a las semifinales de la Copa del Rey gracias a un solitario gol de Henry en 180 minutos (1-0; 0-0 en la ida), pero en el partido de vuelta en el Camp Nou todos los elogios se los llevó un inspirado Leo Messi, que volvió a cuajar una sensacional actuación, y también el meta del Villarreal, Diego López, quien paró un penalti.

El encuentro se decidió en los últimos minutos de la primera parte, en la que en dos acciones de Messi, la joven estrella argentina sacó dos amarillas a Cygan, que acabó expulsado. En la primera de las dos faltas, Henry marcó de cabeza el gol barcelonista.

El Barça se lanzó a por el partido desde el primer minuto, a partir del cual se hizo con el control del balón, aunque tuvo los problemas habituales en el Camp Nou, especialmente cuando el rival sólo le dejó jugar en tres cuartas partes del campo.

Pellegrini mantuvo la compostura atrás con disciplina defensiva, además de beneficiarse de la nula movilidad de los atacantes del Barça. A pesar de este orden, el Villarreal no sabía sacar el balón por la presión asfixiante de una media del Barça que se hartó de robar.

Poco a poco el Villarreal fue reculando por el empuje barcelonista y por una animación en el Camp Nou desconocida (la megafonía con música se escuchó durante el partido). Henry empezó a solicitar balones y a encarar la meta, igual que Messi. Atrás, Diego López, muy seguro, resolvió con acierto todo lo que le llegó.

Márquez, en el minuto 21, estuvo a punto de inaugurar el marcador. Seis minutos después se produjo la jugada del partido hasta el momento, cuando Diego López rechazó en dos ocasiones el balón, disparado por Messi, y en la tercera acción, Deco lanzó alto. Nuevamente Messi, en el 34, quiso resolver en una acción individual que el meta atajó. En esta jugada, el argentino mantuvo la compostura en el área, después de que Cygan le hiciese penalti, que el árbitro no señaló porque el barcelonista continuó con la acción. Diferente fue en el minuto 41, cuando Cygan aplacó al argentino, tras cuya falta Henry cabeceó a gol (1-0).

En la siguiente acción, tras el tanto barcelonista, Cygan volvió a cometer falta a Messi en la frontal y el árbitro le enseñó la segunda amarilla y se expulsó. La falta la lanzó Messi y Diego López, en el minuto 45, volvió a realizar una feliz intervención. La segunda parte fue absolutamente del Barcelona. El Villarreal, con un jugador menos, dio un paso atrás y esperó un contragolpe que no supo armar. El partido entró en una fase de dominio total de los locales, pero también de aburrimiento. Sólo las acciones de Messi elevaron el tono del partido. En el minuto 54, el argentino llegó a sortear hasta a cinco jugadores dentro del área levantina, y en el 64 volvió a realizar una grandísima acción, pero sin recompensa.

En el minuto 75, la rutina en el partido se rompió con la entrada de Ronaldinho en el campo, pero mientras esperaba en la banda, una pase largo de Xavi lo controló Bojan, y a la salida de López, el joven barcelonista cayó y el árbitro señaló un penalti muy protestado. Messi lanzó a la derecha del meta, que le aguantó todo lo que pudo, y paró su disparo.