No dio opción. Escuchó el pistoletazo de salida, arrancó, se colocó en cabeza y se acabó la historia. Abdelhadi El Mouaziz se llevó la gloria del atletismo urbano. El atleta marroquí fue el primero en cruzar la línea de meta  tras concluir los 10 kilómetros de la I Carrera Urbana Universidad Ciudad de Granada ayer. Con un tiempo de 31:58, el dorsal número 696 dominó la popular prueba de principio a fin. El corredor hizo gala de una espectacular resistencia e hizo sucumbir a sus rivales con facilidad mostrando, incluso, cierto aire de extravagancia.

A sólo 20 segundos llegó el siguiente clasificado, Manuel Santiago. Escasa diferencia, menor de la que transmitían las sensaciones de carrera. Pablo Sánchez fue tercero. Su tiempo, 33 minutos y 1 segundo, a sólo tres de su más próximo perseguidor, que se llevó la ficticia 'medalla de chocolate'. En definitiva, un éxito de competición. Pero también un triunfo de participación, en la primera edición de una cita que, con casi total seguridad, repetirá dentro de un año.

La, aproximadamente, media hora que duró la disputa por el primer escalón del cajón fue simple. Ya en los primeros 500 metros, El Mouaziz distanció al resto. No le importó el nublado ambiente, el sube y baja del trayecto a cubrir -que convertía la marcha en un auténtico 'rompepiernas'- ni la exagerada preparación con la que llegaban algunos de sus competidores. Aceleró y aguantó. Ese es el resumen de su mañana. Y eso que el ritmo con el que inició su andadura no fue, ni mucho menos, pausado.

Tan sobrado parecía ir el africano que ni siquiera agarró una botella de agua en el punto de avituallamiento situado en el kilómetro 5. Hasta tuvo tiempo de saludar al  público que se agolpaba en las aceras. Mientras, a su espalda, un pequeño grupo de unos seis corredores trataban de recortar distancia. A los 7.000 metros, un acelerón del dorsal 753 le permitió descolgarse de sus 'colegas'. El líder, sin embargo, aún estaba lejos. De ahí al final, nada más que contar. Victoria sin paliativos para Abdelhadi El Mouaziz. 300 euros y un lote de material deportivo fue su 'oro'.

Alrededor de 1.500 participantes se dieron cita en la matinal en el entorno de los Paseílllos Universitarios de Fuentenueva. Un millar y medio de deportistas que vencieron a la fría brisa y a la llovizna. En categoría femenina absoluta -aunque no se hizo distinción a la hora de correr-, la vencedora fue Esther Hidalgo, al completar los 10.000 metros parando el crono en 36:22. Haley Sparks fue la siguiente en terminar un recorrido repleto de historia universitaria, en 39 minutos y 39 segundos. Dori Ruano completó el hipotético cuadro de honor con una marca de 41:41.

La denominación de la competición se debía a la organización de la misma, compartida 'a la limón' entre el Centro de Actividades Deportivas de la UGR y la Concejalía de Deportes del Ayuntamiento capitalino. Ser universitario no era una obligación forzosa para ser uno de los 'runners', aunque sí se distinguió al más rápido de entre los integrantes de la institución informativa, que fue el ya mencionado Pablo Sánchez.

Además de la absoluta, también hubo hueco para otras categorías. Los benjamines corrieron 400 metros y, los alevines, 800. 1,5 kilómetros fue la distancia a superar por los infantiles, cadetes y juveniles. Aparte del carácter competitivo, la otra gran atracción fue la de practicar atletismo libremente por algunos de los rincones más emblemáticos de la vida universitaria granadina. El centro histórico presentó sus mejores galas para acoger a atletas de toda edad y condición. Acabar ya fue un verdadero logro para muchos, por lo que las caras alegres en las llegadas fueron una constante. Dicen que la Universidad es formación, es tolerancia, es apertura de miras. Ayer y a partir de ahora, también será sinónimo de deporte.