El Real Madrid se vengó dos días más tarde de la derrota que sufrió el pasado jueves en la Euroliga, en Málaga, y barrió ayer al Unicaja en la Caja Mágica en un encuentro que sentenció en los primeros 20 minutos.

El equipo blanco, con un gran Felipe Reyes, 18 puntos, once rebotes y 29 de valoración al final, dejó casi sentenciado el choque en el primer tiempo, durante el que endosó un 51-33 al Unicaja, que defendió muy mal, hizo uno de doce en tiros de tres en los primeros dos cuartos, un 8 por ciento, y donde el único que se salvó fue Joel Freeland.

El Madrid enseguida se distanció en el marcador de la Caja Mágica, cada ataque local era una canasta ante una nefasta defensa del cuadro de Málaga. Reyes no encontró rival en la zona. Resultado: 32 puntos del Madrid en diez minutos. Messina dio entrada a un Mirotic excepcional y con Velickovic jugando sus mejores minutos de la temporada, el Madrid se marchó definitivamente, mientras que en el Unicaja fracasaban todas las combinaciones de su técnico para detener el ataque del Madrid que en el minuto 15 ya sumaba una ventaja de 15 puntos (42-27) y 17 a dos minutos y medio del descanso.

El cuadro local afrontó el segundo tiempo con una ventaja de 18 puntos, que administró perfectamente hasta el final.