Apuntaba Juan Carlos Cordero durante la presentación de David Lombán el pasado martes que, aunque pueda parecer lo contrario, la plantilla no estaba cerrada. Y para muestra, un botón: el meta Oier Olazábal puede dejar de ser en breve portero del conjunto rojiblanco, ya que la Real Sociedad está interesada en su contratación y ambos clubes están negociando un posible traspaso.

El movimiento, a diferencia de otras salidas que se han producido o las que están por llegar, no parte del conjunto nazarí, sino que ha sido la escuadra vasca la que se ha dirigido al Granada para interesarse por el ex portero del FC Barcelona.

La intención del club que preside Quique Pina es no dejar salir a Oier. El técnico José Ramón Sandoval está satisfecho con su aportación y, además, es un jugador ejemplar dentro del vestuario pese a que la pasada campaña no tuvo demasiadas oportunidades y se prevé que en la que va a comenzar en breve suceda lo mismo tras la llegada de Andrés Fernández.

Independientemente de eso, en el Granada entienden que con estos dos cancerberos, más la aportación de Dimitrievski como tercer portero de la primera plantilla y principal del filial, la portería está cubierta con garantías toda la temporada, por lo que no se han planteado modificar el plan, ya que eso supondría con casi total seguridad tener que buscar otro meta que dé la talla pero que acepte un posible rol de meta secundario.

Con todo, las negociaciones existen y en los próximos días puede pasar cualquier cosa, ya que la Real Sociedad desea que Oier sea el competidor del argentino Gerónimo Rulli en el marco donostiarra. Además, el vasco está por la labor de hacer las maletas y volver cerca de su casa.

Así lo manifestó ayer el propio Oier en declaraciones a Radio Marca. "Si va todo bien, estaríamos encantados de volver a casa, de volver a la Real. Venir a la Real sería muy buena opción. Estamos valorando la posibilidad. Están hablando entre clubes. Me han tratado muy bien en Granada, pero la posibilidad de volver a la Real existe, hay que esperar", explicó el meta.

Oier, que fue titular en el amistoso del pasado martes contra el Al Wasl en Benalmádena, tiene contrato con el Granada hasta junio del 2018 tras haber llegado al pasado verano a la entidad rojiblanca traspasado por el Barcelona en una operación sin coste para el club rojiblanco, que sí tendría que pagar al azulgrana un tanto por ciento en caso de una hipotética venta del portero.

El cancerbero disputó la pasada temporada con el Granada catorce partidos de Liga y casi todos los de la Copa del Rey, aunque alternó buenas actuaciones con errores importantes en partidos clave, como el cometido en el choque ante el Levante en una inexplicable salida para cortar un saque de banda rival que acabó con un gol en contra.