Manuel Santiago y Lourdes González son, desde ayer, los nombres más destacados del atletismo granadino. Ambos corredores fueron los que capturaron el oro de la autodenominada Media Maratón "más bella" del mundo. Para la historia quedarán las marcas de 1:11:25 y de 1:25:41 que los dos atletas lograron, respectivamente, en la meta del Complejo Deportivo Núñez Blanca, en la trigésimo quinta edición, la última, de la 'Ciudad de Granada'. Los 21 kilómetros, según la propia organización, más hermosos del panorama deportivo que entronaron a los primeros espadas del club Olimpo y del AD Marathon.

Tanto Santiago como González ya venían de una gran actuación en el último Memorial Padre Marcelino -segundo y primera-. No contentos, la prueba agustina fue para ellos sólo la antesala de su éxito de anoche. Para el vencedor de la categoría masculina, un triunfo, además, del que ya conocía el sabor. Y es que el granadino llegaba como vigente campeón y revalidó su título. Ganó por segundo año consecutivo sobre el asfalto capitalino en una carrera que dominó de principio a fin. El jiennense Alejandro Jiménez, que se colgó la plata, fue capaz de seguirle el ritmo sólo cuatro kilómetros. Desde ese instante, la superioridad de Santiago fue manifiesta en un itinerario repleto de 'falsos llanos'.

Similar fue el argumento de la competición femenina. Lourdes González, que ya fue segunda hace tres años, marcó un tempo imposible para el resto. Ni siquiera Zhor El Amrani pudo dificultarle al final su victoria. La atleta de origen marroquí, que ganó en la última edición de la populosa carrera disputada el pasado noviembre, tuvo que conformase con el segundo puesto al detener el crono en 1 hora, 30 minutos y 10 segundos. El cuadro de honor lo completaron Carlos García (1:16:36) y María Victoria García (1:32:42).

Una cita que ha evolucionado su naturaleza con respecto a capítulos anteriores; hecho que, a juzgar por las palabras de los actores, ha sido un acierto. Se ha reubicado en el calendario, con la primavera ahora como protagonista; y también en el tiempo y en el escenario. Los casi 3.000 osados que se calzaron ayer las zapatillas y se ciñeron los dorsales recorrieron muchos de los espacios más emblemáticos de la capital en la tarde-noche granadina, con una temperatura algo fresca pero que, en comparación con los días previos en los que la lluvia amenazó, acompañó. En el atardecer de la avenida Emperador Carlos V tomaron la salida los locales y foráneos que se atrevieron a combatir al cansancio asegurado, donde se instaló el inicio de una cita que, prácticamente, paralizó la ciudad.

La organización, a la batuta de la Concejalía de Deportes del Ayuntamiento de la Plaza del Carmen, deparó, además de esa serie de variaciones, otra más destacada; quizá, la más relevante. Y es que se apostó por un novedoso itinerario en el que los miles de runners atravesaron rincones de tanta historia y tradición como el Albayzín, el Realejo o la Alhambra. Carrera del Darro, Cuesta de Gomérez, Molinos, San Nicolás… Todos, emplazamientos con solera, leyenda y clasicismo de una urbe cada vez más entregada al atletismo.

También hubo nuevas apuestas en lo meramente deportivo. Se han introducido este año varias modalidades de participación en la carrera, como la prueba por relevos -en la que los 21.000 metros estipulados se recorren al alimón entre dos atletas, con el remplazo del testigo entre ambos en la calle Concepción Arenal- o la que permitió recorrer sólo los últimos diez kilómetros a aquellos que así lo desearon. Pocos detalles se les escaparon a los impulsores de un evento que comenzó siendo el sueño de poco más de un centenar de amantes del running -en la primera edición, celebrada en 1982, la cita contó únicamente con poco más de 100 corredores-.

Por si las fuerzas flaqueaban o, simplemente, para amenizar el esfuerzo desinteresado de los atletas, el Área de Deportes de la casa consistorial granadina decidió poner en marcha igualmente varias alternativas de animación, tanto en la salida, como en la meta o en determinados puntos del recorrido. La música en directo alivió la fatiga -o, al menos, lo intentó- de los participantes y desde horas antes los más curiosos y ansiosos pudieron disfrutar de la 'Feria del Corredor', instalada en el pabellón del Núñez Blanca, con stands y expositores de algunos centros y marcas deportivas.

Pero si algo caracteriza a la 'Media' es la oportunidad que cada año da de demostrar sus cualidades y su talento a los más jóvenes, así como sus habituales jornadas técnicas en las que los expertos ofrecen su visión sobre el deporte y el fondo. Las célebres 'Carreras Escolares' inauguraron el sábado previo, unas competiciones que reunieron a una centena de promesas y diamantes en bruto procedentes de las categorías inferiores de los clubes de la provincia que hicieron las delicias de los improvisados animadores. Es la cuna de un atletismo que vive en Granada una época dorada. No hace falta retrotraerse demasiado en el tiempo para comprobarlo. El último ejemplo es el récord de España que consiguió también ayer Laura Bueno en los 500 metros. Una carrera que sumó a su atractivo deportivo la belleza y singularidad del casco histórico de una ciudad rendida al atletismo.