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El Sevilla, ante el Eibar con el Leganés al fondo

  • Los de Montella, entre el esfuerzo de la ida de semifinales de Copa y la inminencia de la vuelta

El preparador italiano del Sevilla, Vincenzo Montella.

El preparador italiano del Sevilla, Vincenzo Montella. / juan carlos vázquez

El Eibar recibe hoy al Sevilla en plena ola de frío con la intención de congelar también las ideas de los sevillistas y la de conseguir una victoria que se resiste desde la penúltima jornada de la primera vuelta en Las Palmas.

Los armeros tratarán de aprovechar las ventajas que tienen respecto a los sevillistas, que no son otras que el factor campo, la climatología, y el hecho de que su rival haya jugado una semifinal de Copa tres días antes del partido.

Mendilibar descartará a Yoel, que pese a estar recuperado aún necesita ritmo, y al recién llegado Jovanovic, y convocará a los 18 restantes, habida cuenta de la salida de última hora de Bebé, que se ha marchado cedido al Rayo Vallecano.

El Sevilla, sexto con 33 puntos -4 más que el Eibar, octavo-, quiere aparcar el partido decisivo que tendrá el miércoles en su casa ante el Leganés, en la vuelta de la semifinal copera, y centrarse en una competición liguera en la que le urge reaccionar para recuperar el terreno perdido.

El Sevilla, que lleva cinco encuentros sin perder, tres en la Copa del Rey y dos en Liga, ha mejorado bastante desde la llegada hace un mes del entrenador italiano Vincenzo Montella, pues el equipo ha retomado su espíritu competitivo y las buenas sensaciones.

Aún con la rabia que provocaron en los sevillistas sus empates ante Getafe en Liga y Leganés en Copa, el italiano ha dado descanso al mediapunta argentino Franco Vázquez y medita hacer más cambios.

Montella podría refrescar a su equipo al estar muy cargados físicamente hombres como el lateral Escudero y el organizador Banega, con lo que podría debutar alguno de los recién llegados, con más opciones para el medio Roque Mesa y el defensa mexicano Miguel Layún ante la sanción del argentino Mercado y las dolencias de Corchia y Kjaer. .

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