Pau Gasol, pívot de la selección española, aseguró ayer, tras su primera sesión de trabajo bajo las órdenes de Aíto García Reneses en la concentración de San Fernando, que el equipo afronta el reto de Pekín "con ambición y prudencia".

Para el jugador español, "ahora lo primero y esencial es pensar en positivo en la cita que tenemos en agosto" para tener "el firme propósito de lograr una medalla". "Eso sería fantástico, porque es uno de los logros de los que España tiene pendiente", subrayó.

Gasol, por otra parte, ha reconocido que el descanso de 19 días que ha tenido tras la final de la NBA se le ha hecho "bastante corto", sobre todo por lo "necesitado de un parón" tras una importante "carga de trabajo" padecida el pasado año.

Ha rememorado sus últimos partidos en la NBA y ha dicho que ha sido tremendamente "bonito el disputar una final del campeonato", aunque añadió que "siempre es una pena no terminar de rematar la faena". De todas maneras el de Sant Boi se ha mostrado agradecido a los Lakers por haberle dado "la oportunidad de llegar hasta la final de la NBA".

En cuanto a su llegada a San Fernando, Pau Gasol ha indicado que "siempre es bonito volver a encontrarse con los compañeros", ya que, según afirma, la selección "sigue siendo una gran familia, donde se pasa muy bien". Gasol ha reconocido, por otra parte, que su nivel no el óptimo y que comenzará "a trabajar por debajo del que tienen de los compañeros", ya que ha reconocido que durante los días de descanso que ha disfrutado no ha hecho "nada en el aspecto físico".