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"La afición me pidió que volviera"

  • Joan Laporta, candidato a presidir el Barcelona, carga contra la gestión de Rosell y Bartomeu

Joan Laporta, aspirante a la presidencia del Barcelona, aseguró que en los últimos meses se estuvo "cargando de razones" para no concurrir a las elecciones, pero el apoyo de los aficionados culés que le decían vuelve y arréglalo lo animó a dar el paso al frente. "Esperé a que saliese alguien honesto y que presentase un buen proyecto, con carácter para ser presidente del Barcelona y con sentido de la responsabilidad, pero no lo encontré. Al ver que esta persona no salía, pensé que debía volver a hacerlo", dijo Laporta en una entrevista a Efe.

Sobre si el triplete del Barça bajo el mandato de Bartomeu le resta posibilidades en las elecciones del 18 de julio, Laporta explica que él ya dijo a los suyos que el Barcelona "lo ganaría todo" esta temporada. "El Balón de Oro a Cristiano y que este desafiase a Leo hicieron que Messi se pusiera las pilas y se echara el equipo a sus espaldas", ha recordado.

De su máximo adversario en la lucha por la presidencia, Josep Maria Bartomeu, Laporta dice que no tiene capacidad de gestionar y recordó que en los primeros años del mandato que inició en 2003 tuvo que destituirlo como responsable del baloncesto: "Después de adoptarse una decisión en la junta, salió junto a mí en la sala de prensa y me contradijo ante los medios. No respetó la decisión de la mayoría". "Bartomeu no tiene capacidad para gestionar un modelo sostenible. Ha estado improvisando y, afortunadamente, el equipo se puso las pilas. Este triunfo para Bartomeu, Rosell y compañía ha sido una liberación, más que un motivo de celebración, porque con el triplete han podido enmascarar su mala gestión", insiste.

El abogado salió a la palestra para volver a la presidencia con una idea clara: vender experiencia y poner nombres encima de la mesa, además de cargar contra la gestión de Bartomeu. "Durante mi época tuve que intervenir en un fichaje en el que Rosell ya quiso establecer un modelo de contratación como el de Neymar. Tiene una manera de hacer que genera mucho riesgo. Tuve que impedir un fichaje que introducía una serie de variables que desde el punto de vista legal generaba muchas dudas y le dije que si hacíamos las cosas como él decía hubiésemos acabado en el trullo", relata.

Sobre las críticas vertidas por salir a la arena electoral sin programa y exhibiendo sólo carisma, Laporta sentencia: "Hemos renovado energías y mejorado el modelo, gracias a la experiencia que acumulo como presidente. Estamos llevando el ritmo de esta campaña. Si tuviésemos que seguir el ritmo de los otros, iríamos parados y tristes".

Del juego sucio que ya empieza a rodear a la campaña observa lo siguiente: "Yo no juego sucio. Estoy centrado en mi propuesta. El juego sucio me lo llevan haciendo más de cinco años. No espero que dejen de hacerlo. Me ha curtido. En las mentiras que me han lanzado, he ganado todas las batallas en los juzgados". "Ellos intentarán continuar esta táctica. Como están procesados por corrupción, por delito fiscal, por apropiación indebida y hay ahora una querella por estafa... Intentan poner a todos en el mismo saco", añade. A pesar de asegurar que no sigue la campaña de Bartomeu, ni del resto de rivales, el reciente ex presidente sigue siendo el centro de sus críticas. "No se entiende cómo en algunas situaciones no han salido con más contundencia. Han dicho que lo volverían a hacer todo igual. Es como una pataleta, en la que los han pillado y en lugar de echarse para atrás y arreglarlo tras admitir el error, siguen y siguen", recuerda.

Acerca de los rivales que espera, Laporta considera que, en la recogida de firmas, "si ya es difícil para los que tenemos posibilidades de ganar, me sorprendería mucho que hubiese un tercer candidato", concluye.

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